Reformas constitucionales que garanticen la participación de etnias en el proyecto nacional, entre los reclamos del segundo Foro Indígena

José Gil Olmos, enviado, y Elio Henríquez, corresponsal, Oventic, Chis., 24 de julio Reformas constitucionales que garanticen la plena participación de los pueblos indios en el proyecto nacional, terminar con las diferencias entre las organizaciones para formar una red nacional y detener la creciente militarización en regiones y comunidades de siete estados fueron algunos de las principales planteamientos presentados en el segundo Foro Nacional Indígena Permanente (FNIP).

Reunidos por segunda ocasión en este año a convocatoria del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), los 135 delegados de 44 organizaciones indígenas y 28 agrupaciones educativas, sociales y políticas aseguraron que muchos delegados no pudieron asistir porque en estos días los militares, que se han desplegado en sus comunidades, hostigan e intimidan a los pobladores y les impiden el libre tránsito.

Ayer se clausuraron los trabajos del segundo foro en Oventic,
Chiapas. Aquí, delegados asistentes entonan el himno zapatista.
Foto: Duilio Rodríguez

Incluso señalaron que autoridades estatales del Instituto Nacional Indigenista, sobre todo en Jalisco, obstaculizaron el viaje a Chiapas.

Divididos en cinco mesas de trabajo y con la asistencia de observadores de 12 países, los participantes discutieron en este segundo día los mecanismos para darle seguimiento a los acuerdos emanados de la mesa ``Derechos y Cultura Indígenas'' del diálogo de San Andrés Larráinzar y realizar nuevas modificaciones al artículo 27 constitucional.

En el Foro Nacional Indígena Permanente se insistió en que los acuerdos del diálogo de San Andrés suponen un ``nuevo pacto social'' entre los pueblos indígenas, la sociedad y el Estado, lo cual ha de dar lugar a una nueva Constitución.

Por ello, destacaron la importancia del funcionamiento de la Comisión de Seguimiento y Verificación para los acuerdos del diálogo entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y el gobierno federal. Los asesores del grupo rebelde consideraron que la citada comisión permitirá comprobar que los compromisos adquiridos por la representación gubernamental se cumplan, ``porque implican un cambio sustancial en las instituciones del Estado que operan en las áreas indígenas''; es decir, se acabaría con ``el indigenismo de subordinación''.

Esta advertencia la hicieron luego de señalar que las propuestas oficiales de llevar a la práctica los acuerdos de San Andrés para la descentralización de los recursos públicos ``pretenden mantener la normatividad de una institución burocrática centralizada''.

En una de las mesas de trabajo del foro se habló de un viejo tema que ahora se intenta superar: la unidad necesaria para crear un frente indígena, sobre todo ahora que se alcanzaron acuerdos a nivel nacional sobre los derechos y la cultura de las etnias.

La representación que vino de Oaxaca insistió en la necesidad de superar diferencias entre las agrupaciones, por ejemplo, con la Asamblea Nacional Indígena Plural por la Autonomía (ANIPA), que se alejó de aquellas que han simpatizado con el EZLN, para llegar a formar una coordinación nacional de pueblos indios.

La unidad fue un planteamiento que se incluyó en la misma iniciativa del diálogo de San Andrés Larráinzar para que se reconozca la autonomía de los pueblos indígenas, lo cual implica la aceptación de sus facultades de autogobierno y justicia.

Este tema y otros relacionados con los cambios de las normas constitucionales tendrían que convenirse con los propios pueblos y para ello habría de efectuar un trabajo de información en todas las lenguas indígenas y dar en cada una de ellas seguimiento a los demás compromisos que surjan de la mesa de San Andrés Larráinzar.

En otra de las mesas de trabajo en que se dividió el foro se discutió el intercambio de productos de diversas regiones para comercializarlos.

Por la noche se instaló la plenaria y los coordinadores previeron que los trabajos culminarían a la medianoche y se informaría de las conclusiones en una conferencia de prensa este jueves por la mañana.

El plan de acción del Foro Nacional Indígena Permanente incluye fortalecer los procesos de cambio a mediano y largo plazos en cada una de las regiones indígenas, dar seguimiento puntual a los acuerdos de la mesa ``Derechos y Cultura Indígenas'', convenidos entre el EZLN y la delegación del gobierno federal en febrero; la convocatoria de un Congreso Nacional Indígena y participar en el Encuentro Intercontinental por la Humanidad y contra el Neoliberalismo, que empezará el 27 de julio y concluirá el 3 de marzo en el Aguscalientes de la comunidad La Realidad, municipio de Las Margaritas.

Momentos antes de que empezara la reunión plenaria en esta comunidad indígena de Los Altos de Chiapas, los participantes expresaron su interés en avanzar en su lucha con base en los acuerdos de San Andrés Larráinzar y en los del FNIP, ``a fin de ir construyendo un espacio a nivel nacional y enfrentar la grave situación de represión y militarización creciente'' que se vive en sus regiones y comunidades.