La Jornada 27 de julio de 1996

Ordenan capturar a la viuda del empresario Ramírez Miguel

Teresa Gurza, corresponsal, Morelia, Mich., 26 de julio Hoy por la tarde el juez segundo en materia penal dictó la orden de aprehensión en contra de María Villalón de Ramírez, de 75 años de edad, por el presunto asesinato de su esposo, el empresario Enrique Ramírez Miguel.

Ramírez Miguel, de 79 años de edad, murió el pasado 6 de junio a causa de las lesiones producidas por 5 impactos de bala calibre 38 Super, que le dispararon a una distancia de entre dos y 25 centímetros, aproximadamente.

De acuerdo con las investigaciones realizadas por la Procuraduría General de Justicia del estado, María Villalón era la única persona que estaba en la recámara de su esposo, cuando guardias privados y servidumbre oyeron los disparos, con intervalos de un minuto. Dos de las balas lo impactaron de pie, dos más cuando caía y el último lo recibió estando en el suelo.

Horas después del crimen, la Organización Ramírez empresa que agrupa a los negocios de la familia Ramírez Villalón emitió un comunicado donde afirmó que la muerte fue causada por un disparo accidental, que el anciano se dio cuando limpliaba su arma. Sin embargo, esa misma noche la Procuraduría dictaminó que la muerte fue por homicidio, y que, aunque la pistola fue accionada seis veces, Ramírez Miguel sólo recibió 5, porque el último no salió del arma. El dictamen también estableció que fue alterada la escena del crimen y borradas las huellas dactilares en el arma.

Casi de inmediato, la viuda, 2 de sus 4 hijos Marco Antonio y Florentino, varios nietos y su nuera Luisa Díaz Cano, abandonaron Morelia aduciendo enfermedad. Se refugiaron en Texas, y pese haber recibido 3 citatorios de la Procuraduría, no acudieron para ampliar sus declaraciones ni para ofrecer sus huellas dactilares.

Días después, mientras la Procuraduría consignaba las averiguaciones y pedía al juez segundo, Enrique Barajas, órdenes de aprehensión contra la viuda y su hijo Florentino por homicidio calificado y homicidio en grado de participación, respectivamente la familia inició una campaña de presión, pagada en periódicos, con firmas de empleados y amigos que avalaron la rectitud de ambas conductas, el amor por el anciano y su empeño en crear empleos para beneficiar a Michoacán. Al mismo tiempo, acusaban a los medios de comunicación nacionales de amarillismo, y de difundir rumores, violatorios a los derechos humanos de la familia Ramírez Villalón.

Pese a que hoy las autoridades guardaron hermetismo, fuentes vinculadas a la policía informaron que fue dictada la orden de aprehensión contra la esposa de Ramírez Miguel, de quien estaba separado años atrás. Además, el juez no consideró que Florentino hubiera incurrido en el delito de proteger a su madre.

Para la aprehensión de Villalón de Ramírez se ha pedido la colaboración de la policía de Estados Unidos, y se pedirá también la de otros países para lograr su captura.