Reabre tribunal de EU el proceso para deportar a Ruiz Massieu
Efe, Nueva York, 29 de julio Un tribunal de apelaciones de Estados Unidos falló hoy en contra del ex subprocurador general mexicano Mario Ruiz Massieu, por lo cual se reanudará el proceso de deportación emprendido por el gobierno estadunidense.
La Corte de Apelaciones de Filadelfia dijo que no se manifestaba sobre el mérito de los puntos constitucionales decididos por el tribunal de distrito, que en febrero pasado había declarado anticonstitucional la orden de deportación cursada por la Casa Blanca contra Ruiz Massieu.
Sin embargo, señaló que el juzgado de distrito no tenía jurisdicción para manifestarse sobre la petición de Ruiz Massieu.
El juez Samuel Alito, del tribunal de apelaciones de Filadelfia, aceptó el argumento del gobierno estadunidense de que si Ruiz Massieu quería evitar su deportación tenía que agotar los procedimientos y recursos administrativos disponibles.
Sólo una vez agotados esos recursos podrá acudir ante el tribunal de apelaciones de Filadelfia, indicó Alito.
``Por tanto, revertimos la orden'' del tribunal de distrito, dijo Alito, quien ordenó desechar la petición de Ruiz Massieu contra el proceso de deportación.
``Es una derrota por el momento'', dijeron fuentes del equipo defensor del ex subprocurador mexicano.
Explicaron que la decisión obligará a Ruiz Massieu a pasar por todo el proceso y, si los otros argumentos contra la deportación no son aceptados por el juez de inmigración, entonces podrá replantear el caso ante el tribunal de apelaciones.
No se sabe cuándo comenzará el proceso ante el juez de inmigración, aunque es posible que sea hasta septiembre, indicaron fuentes próximas al equipo de abogados del ex subprocurador.
Tampoco está claro si Ruiz Massieu podrá seguir bajo arresto domiciliario, en el que se encuentra desde marzo pasado cuando fue excarcelado después de un año de prisión, o si las autoridades van a volver a encarcelarlo.
El año pasado, dos jueces de Newark (Nueva Jersey) rechazaron cuatro intentos del gobierno mexicano por obtener la extradición del ex subprocurador, al que acusan de obstrucción a la justicia en las investigaciones sobre el asesinato de su hermano José Francisco Ruiz Massieu, y de peculado.
Después del último rechazo de la petición de extradición el pasado 22 de diciembre, el gobierno de Estados Unidos ordenó la deportación de Ruiz Massieu.
Invocando una ley para la deportación, el secretario de Estado, Warren Christopher, alegó que la presencia del ex subprocurador mexicano podría tener ``consecuencias adversas'' para la política exterior de la Casa Blanca.
La víspera de que el gobierno estadunidense emprendiera el proceso de deportación contra Ruiz Massieu, éste pidió asilo político, pero esa solicitud fue devuelta por ``incompleta''.
Posteriormente, el ex funcionario mexicano volvió a presentarla, empero, cuando un extranjero está en proceso de deportación, son los jueces de inmigración encargados del mismo los que se deben manifestar al respecto.
Los abogados de Ruiz Massieu apelaron contra la orden de deportación, y el pasado 28 de febrero la magistrada Maryanne Trump Berry dictaminó que el propósito del gobierno de Washington era anticonstitucional y discriminatorio al negar al acusado el derecho fundamental de defenderse ante los tribunales.
Trump Barry mantuvo que era ``vaga'' y desfasada la ley que permite al secretario de Estado ordenar la deportación de una persona por motivos políticos.
El pasado 6 de marzo, casi un año después de ser detenido en el aeropuerto de Newark, cuando estaba en tránsito camino de España, por llevar más dinero del declarado a los aduaneros, Ruiz Massieu consiguió la libertad bajo fianza.
Pero permaneció bajo arresto domiciliario a la espera de que el tribunal de apelaciones de Filadelfia fallara sobre el recurso cursado por la Casa Blanca, lo que ha hecho hoy esta corte.
El tribunal de apelaciones no ha hecho caso de la ``futilidad'' que supone pasar por todo el proceso de deportación para luego volver ante esa corte con el mismo argumento sobre la inconstitucionalidad de la ley invocada por el gobierno de Estados Unidos, dijeron fuentes próximas a la defensa del ex subprocurador.
Un juez de inmigración no puede considerar argumentos de tipo constitucional, agregaron. Por tanto, la decisión del tribunal de apelaciones va a suponer mucho esfuerzo, tiempo y dinero perdidos.
El juez Alito dijo que el agotamiento, por Ruiz Massieu, de los procedimientos y recursos administrativos ante los jueces de inmigración ``servirá a propósitos importantes'', e incluso podría hacer superflua la necesidad del involucramiento de los tribunales federales en este caso.