Responderá la PGR a acusaciones de Domiro García a Lozano y Chapa
Juan Manuel Venegas La Procuraduría General de la República (PGR) responderá a las graves acusaciones que en el libro Domiro hace el general García Reyes, quien acusa al procurador Antonio Lozano Gracia y al fiscal Pablo Chapa Bezanilla de acosarlo, abusar de su condición de funcionarios, de haberlo humillado e inventarle imputaciones como su presunta relación con O-thón Cortés Vázquez.
Incluso el que fuera coordinador del equipo de seguridad de Luis Donaldo Colosio responsabiliza a Lozano, Chapa Bezanilla y al coordinador del caso Colosio, Arturo Rangel, de cualquier hecho que atente contra su integridad física y la de su familia.
La PGR responderá a estas afirmaciones de Domiro García Reyes, quien es sujeto de investigación por parte de la fiscalía especial por las recurrentes contradicciones en sus declaraciones ministeriales y a los medios de comunicación.
Esas contradicciones de García Reyes, según el esquema de la fiscalía, refuerzan la tesis de que Cortés Vázquez, presuntamente la segunda persona que disparó contra Colosio, sí tenía relación con miembros del Estado Mayor Presidencial y que su presencia en Lomas Taurinas el 23 de marzo de 1994 ``obedeció a tareas debidamente asignadas''. Para esto, la fiscalía cuenta con fotografías y videos donde aparece Othón conduciendo el automóvil donde viaja García Reyes.
El general ha dicho que si no recuerda ``algunos detalles'' anteriores y posteriores al crimen de Lomas Taurinas, se debe ``a fallas emocionales'' y al ``bloqueo'' que sufrió, impactado por el asesinato de su jefe. Sin embargo, los investigadores no ceden ni creen ante esa explicación.
La última de esas contradicciones que registró la PGR tiene que ver con su declaración ministerial del 22 de enero pasado, cuando afirmó desconocer que hubiese existido amenaza anónima contra el candidato. No obstante, en entrevista con algunos medios --entre ellos La Jornada-- reconoció que el mayor Héctor Eustolio Morán ``alguna vez me mandó una carta sobre una supuesta amenaza que se investigó''.
El libro Domiro, escrito por los periodistas Joaquín López Doriga y Jorge Fernández Menéndez, consigna una grabación que el general García Reyes hizo el 18 de febrero de 1996 ``con la intención de nunca ser escuchada''.
En la cinta, García Reyes manifiesta su esperanza de que ``Chapa Bezanilla no se vaya a salir con la suya porque no tiene razón, porque ha abusado de su poder desprestigiándome, humillándome, calumniándome, injuriándome, acosándome y difun- diendo falsa información en torno a mis declaraciones''.
Agregó: ``Por eso responsabilizo a Antonio Lozano Gracia, a Pablo Chapa Bezanilla, a Arturo Germán Rangel, que son los que tienen a cargo la investigación, de que han abusado de su condición, de que han calumniado mi persona, de que me han humillado, de que me han ofendido, de que me han tachado de asesino''.
Afirma que ``no han hecho las investigaciones apropiadas, sus acusaciones son puros supuestos, yo no sé si esto se podrá leer en algún periódico pero ésta es mi verdad, no la verdad que Antonio Lozano Gracia y Pablo Chapa Bezanilla pretenden hacer creer el pueblo de México''.
Señala por último: ``Los responsabilizo de lo que le pase a mi esposa, a mis hijos, a mis padres, a mis hermanos, a cualquier miembro de mi familia o a mis amigos...''