Nula respuesta en Los Pinos a 2 mil inconformes con el examen único

Rosa Elvira Vargas y José Gil Olmos Sin una respuesta oficial cercana a sus pretensiones, un grupo de aproximadamente dos mil inconformes con los resultados del examen único para ingresar al nivel medio superior marchó ayer rumbo a Los Pinos y causó un gran congestionamiento vial al cerrar el Paseo de la Reforma a la altura del Auditorio Nacional, así como algunas salidas del Periférico.

Ya de noche y tras casi seis horas de intentar que la comisión negociadora fuera recibida en la residencia presidencial, los manifestantes sólo obtuvieron la promesa verbal de que mañana sábado serán atendidos en las oficinas del Consejo del Sistema Nacional Técnico de Educación Tecnológica, ubicadas en Vértiz 211.

Los manifestantes quemaron mantas de la Comipems,
como la que traían las mujeres policías, quienes
hicieron una valla frente al Museo de Antropología.
Foto: Víctor Mendiola

La respuesta fue calificada por los padres de familia y estudiantes como ``una burla'' a sus demandas, ni siquiera se formalizó por escrito como lo pidieron y tampoco se precisó la hora en que podrán ser recibidos en esa institución, de la cual nadie tenía prácticamente noticias y que incluso se difundió como que era el Consejo Nacional de Educación.

Después de una intensa lluvia y tras el cansancio por la marcha que inició después de las 11 y media de la mañana, quienes aún permanecían en las inmediaciones de la estación del Metro Auditorio Nacional -pasadas las nueve de la noche- llegaron a proponer medidas radicales y definitivas para lograr que se les atienda, entre ellas la toma de la Rectoría de la UNAM y de las oficinas de la SEP para el próximo lunes.

La manifestación a la residencia oficial de Los Pinos tuvo puntos coincidenttes con otras marchas recientes y uno de cierta manera inédito en lo referente a la interlocución con las autoridades.

Así, mientras la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) instaló de nuevo una valla de mujeres policías a la altura del Museo de Antropología para tratar de persuadir a los manifestantes; resultó novedoso que la comisión formada por los inconformes para tratar de dialogar en Los Pinos, jamás fue recibida y sólo pudieron hablar con funcionarios menores detrás del bloqueo de granaderos en el puente de la Calzada Chivatito.

La manifestación convocada para salir del Monumento a la Revolución partió retrasada y con alrededor de mil 500 padres de familia y estudiantes a quienes se les unieron, a la altura del Circuito Interior, unos 150 integrantes del Comité Estudiantil Metropolitano (CEM) que se reunieron en el Monumento a los Niños Héroes de Chapultepec.

A su paso, los manifestantes derribaron grandes mantas colocadas en el Paseo de la Reforma donde la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior (Comipems) decía a los aspirantes que cumplieron con los requisitos establecidos, que obtuvieron una asignación, y tienen un lugar para ellos, que deben presentarse en los módulos de información del Ceneval.

Frente al Museo de Antropología, donde estaban las mujeres policías, los manifestantes fueron abordados por Octavio Flores, de la Secretaría de Gobierno del Departamento del Distrito Federal y Félix Lavanderos, de la Comipems, quienes pretendían ahí mismo escuchar a los inconformes y disolver la marcha. Finalmente, cuando llegaron a Chivatito, los mismos funcionarios sólo ofrecían como salida, el que una comisión se trasladara a Palacio Nacional, donde serían recibidos en la oficina de Atención Ciudadana.

Sin embargo, los estudiantes rechazaron esa opción, ya que ahí han acudido al menos tres veces, y aparentemente obtuvieron el paso a Los Pinos, pero en realidad sólo traspasaron la valla de granaderos y de ahí ya no avanzaron. Esto sucedió poco después de las tres de la tarde y a las nueve de la noche no habían obtenido alguna respuesta concreta.

Aproximadamente a las cuatro y media, diversos grupos decidieron cerrar el Paseo de la Reforma y algunas salidas del Periférico, a la altura de Polanco, que no sólo provocaron un enorme congestionamiento vial, sino que impidieron la llegada de un gran número de asistentes al espectáculo infantil que se presentó en el Auditorio.

La frustrada comunicación con Los Pinos no impidió que los manifestantes hicieran llegar al presidente Ernesto Zedillo -a través de sus funcionarios- una carta en la que reiteraban su desacuerdo con ese proceso de examen, porque ``a miles de aspirantes se les impuso unilateral y arbitrariamente una opción educativa y vocacional muy opuesta a sus preferencias''; y a muchos también, ``se les envió a planteles que geográficamente están entre dos y cuatro horas de distancia de sus domicilios''.

También aseguran que según sus cálculos más de 20 mil aspirantes fueron excluidos al no darles oportunidad de presentar exámenes extraordinarios antes del 19 de julio; porque los resultados han significado ``un fraude total por las múltiples irregularidades que se han presentado, desde el diseño del examen, hasta su aplicación y el manejo tendencioso de los resultados por las autoridades correspondientes''.

De igual modo en el documento, reiteran sus cinco demandas básicas: inscripción inmediata en una de las cinco primeras opciones que señalaron los aspirantes; que la UNAM y el Politécnico recuperen y aumenten su matrícula; que desaparezca el Ceneval; rechazo a los exámenes que impidan el acceso de los aspirantes a la educación media superior y superior y, que se abra un canal para resolver todos y cada uno de los casos con la participación de los representantes de la Comipems.

Por último, ayer se inició la difusión de los resultados de cambios y permutas solicitados tras las asignaciones del Ceneval por el examen único, la Comipems señaló que se aprobaron las peticiones únicamente en los DGETIS, DGETAS, Cecytem y Conalep, puesto que las solicitudes para la UNAM y el Politécnico fue imposible atenderlas, debido a que esas instituciones ``ya tienen inscritos a todos los estudiantes que pueden aceptar''. Resaltó que ``con esta respuesta se atiende positivamente la gran mayoría de las solicitudes presentadas''.

Por su parte, el subsecretario de Servicios Educativos para el Distrito Federal, Benjamín González Roaro, consideró como ``natural'' la inconformidad ``de algunos'' por la opción asignada para el bachillerato. Sin embargo, planteó como positivo que todos tengan asignado un plantel.

Hoy al mediodía habrá una reunión en la SEP entre Miguel Limón Rojas y legisladores de las Comisiones de Educación de las Cámaras de Diputados y Senadores