Plantea éste cambiar de nombre a la Judicial Federal
Juan Manuel Venegas ``Cuando llegué a la Procuraduría General de la República muchos me dijeron que contra la corrupción en la Policía Judicial Federal no puede hacerse nada. Me quedé ante dos caminos: conformarme con una realidad que no se puede modificar o hacer el intento, y como a nadie le gusta estar en un equipo perdedor, pues me decidí a tratar de cambiar esa realidad''.
Lo anterior fue dicho por el procurador Antonio Lozano Gracia a 234 nuevos agentes de la PJF, recién egresados del Instituto de Capacitación.
Todos jóvenes, no mayores de 25 años, escucharon al funcionario ofrecerles ``una perspectiva de desarrollo'' (ganarán 3 mil 800 pesos mensuales) y procurarles la posibilidad de que adquieran casa, la seguridad de que sus hijos recibirán educación y ``diversos satisfactores que son necesarios para que una familia se desarrolle adecuadamente'', dijo el funcionario.
Fresca todavía la decisión de cesar a 737 elementos de la corporación ``por no tener el perfil ético que la institución requiere'', Lozano Gracia ``leyó la cartilla'' a los nuevos integrantes:
``El problema es que la (mala) actuación de algunos, por desgracia, califica la de todos y no podemos ocultar que tenemos un severísimo problema de corrupción en la policía, esto no lo podemos ocultar (ya que) nos estalla todos los días en la prensa.
``Así es que, conscientes de eso pero de que también tenemos buena gente, debemos hacer un cambio de fondo, estructural, y es lo que estamos haciendo porque no estamos dispuestos a pertenecer a una institución que no satisfaga los reclamos de la sociedad''.
Y para que no quedaran dudas de los cambios que pretende, Lozano Gracia adelantó que desaparecerá el nombre de Policía Judicial Federal. ``Queremos que el nuevo nombre le dé la exacta dimensión que tiene en el ámbito de la investigación y que depende del Ministerio Público...'', señaló
El Auditorio México de la PGR estaba lleno. Los nuevos agentes, todos vestidos con casaca y pantalón azul marino, botas negras, corte de cabello tipo militar, ni chistaban.
El procurador les encomendó una tarea que, según dijeron algunos, nunca esperaron: ``Su graduación se da en momentos muy importantes para la institución, sin precedentes... la decisión que tomamos el viernes (el despido de 737 agentes y comandantes) no es una medida aislada y tiene que ver con una visión integral de cómo manejamos un problema (la corrupción) que es lacerante para la institución, pero más grave aún para la sociedad''.
El mensaje de Lozano Gracia no sólo fue una llamada de atención a las nuevas generaciones de policías, también se dio tiempo para, primero, ponerse como ejemplo y segundo ofrecer:
``Nadie puede estar satisfecho de pertenecer a un equipo perdedor. Tal vez recuerden ustedes los retos que a mí me comentaban cuando llegué acá, de enfrentar la corrupción en la Policía Judicial Federal y que mucha gente me decía que no puede hacerse nada en ese sentido.
``Ante esas versiones o esas opiniones pesimistas, no quedaba nada, solamente quedaban dos caminos: conformarse con una realidad que no se puede modificar o tratar de hacerlo. Nosotros estamos tratando de modificar esa realidad y en ese marco ustedes ingresan ya al servicio de la Policía Judicial Federal''.
Luego vino la arenga del funcionario:
``Vamos a formar policías con conciencia, con valores, con pleno conocimiento de que la labor que van a enfrentar es muy difícil, implica riesgos, pero implica también una gran oportunidad de servir a México, y vamos a dar un seguimiento del desempeño de todos ustedes, porque no sólo se trata de detectar a los malos servidores públicos sino también a los buenos y poderlos estimular y poderlos reconocer adecuadamente''.
El momento ya era propicio para ofrecer: ``Lo tercero que tengo que hacer es dar una perspectiva de desarrollo, poderles decir: mira, esta es la perspectiva que tienes frente a tí y si te comportas adecuadamente vas a tener esa perspectiva, la posibilidad de un mejor ingreso, la posibilidad de ascensos, de un reconocimiento, la posibilidad de tu satisfacción personal y del reconocimiento de los demás''.
Además de esa perspectiva de mejora salarial, agregó Antonio Lozano Gracia, ``las medidas que estamos implementando (sic) tienen que incluir la posibilidad de que ustedes adquieran una casa, tiene que incluir la seguridad de que sus hijos serán educados, tiene que incluir el que puedan adquirir diversos satisfactores que son necesarios para que una familia se desarrolle adecuadamente, tiene que incluir la posibilidad de que esos ascensos se los ganen ustedes mismos y nunca más vuelva a darse la realidad (sic) de que asciendan gentes sin merecimientos y por relaciones''.
Al salir, varios de esos nuevos 234 agentes federales platicaron con los reporteros.
Dijeron que durante el año que duró su curso en el Instituto de Capacitación recibieron clases de derecho, se les explicó la Ley Orgánica de la Procuraduría General de la República, se les recomendó respetar los derechos humanos y algunos temas más.
También hubo cursos de defensa personal y uso de armamento como R-15, AK-47 y 9 milímetros.
La mayoría de los nuevos agentes expresó que esperaba un mejor salario, pero ``nos dijeron que lo más que podemos ganar son 3 mil 800 pesos mensuales'', dijeron