Duda la PGR que la Iglesia tenga pruebas en su contra
Ciro Pérez Silva, Juan Manuel Venegas y Salvador Guerrero La Procuraduría General de la República (PGR) puso en duda que la Iglesia católica tenga pruebas que le permitan asegurar que el asesinato de Luis Donaldo Colosio fue ordenado por ``altas esferas del poder'', al hacer referencia al editorial del órgano oficial de la Arquidiócesis de México.
En esa publicación se afirma que los recursos utilizados para la realización del homicidio, y especialmente el manejo de las investigaciones, ``nos hacen ver que el origen de esas complicidades, en otras palabras, el autor intelectual, estuvo en los más altos círculos del poder''.
La dependencia aseguró, por su parte, que mantendrá su posición ``de no informar a nadie'' del curso de las investigaciones que sigue, ``tal y como lo ordena la ley en estos casos'', en tanto no concluyan las pesquisas y se pueda hablar de un resultado concluyente.
Puntualizó que ``siguen abiertas todas las líneas de investigación'', y que las indagatorias no se detuvieron con la sentencia absolutoria del presunto segundo tirador, Othón Cortes Vázquez. Agregó que una investigación de esta naturaleza ``es muy compleja'', y lo ha sido aún más al mantenerse todos los días en la prensa el mismo tema. ``En ese esquema todo se teje alrededor de suposiciones, detalles aislados y fuera de contexto'', subrayó.
Sostuvo que no habrá, ``cuando se cuadren elementos'', impunidad alguna ``ni en este ni en ningún otro caso'', e insistió en que la dependencia ``no va a fabricar culpables'', luego de reconocer que en otras ocasiones se han tenido avances en la investigación que, al final, no se pueden comprobar.
Al referirse al asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo que, según algunos miembros de la jerarquía católica fue un acto premeditado y no un accidente, la Procuraduría General de la República también desestimó esas declaraciones, pues afirmó que, ``como el caso Colosio, que ahora pretenden señalar, tampoco han aportado pruebas y no se vale que digan que tienen a un testigo pero que no lo pueden presentar''.
Por su parte, en la Secretaría de Gobernación trascendió que la dependencia verificará si el contenido del editorial de la publicación religiosa Nuevo Criterio corresponde a la opinión del clero católico, antes de dar su punto de vista al respecto.
El tono y la sustancia del editorial ``parecen no corresponder'' con la actitud ``responsable y respetuosa'' de la Iglesia católica, indicó una fuente de Gobernación, al referir que se conoce que la publicación es bien distribuida y puede leerse en un buen número de las mil iglesias católicas que hay en la arquidiócesis de la capital del país, pero que existen antecedentes que demuestran que la opinión de una publicación puede ser diferente de la autoridad a la que dice representar.
A su vez, la Procuraduría General de la República se negó a confirmar si existe alguna línea de investigación que vincule al ex presidente Carlos Salinas de Gortari con el homicidio del ex candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional, y sólo reiteró que ``se abarcan todas las líneas de investigación y se llamará a quien tenga que llamarse, independientemente de su posición política''.
Al referirse al nombramiento del nuevo fiscal que sustituirá a Pablo Chapa Bezanilla en las investigaciones del caso Colosio, la Procuraduría General de la República sostuvo que la posibilidad de coadyuvancia por parte del Congreso ``tiene que generar confianza en la persona que se designe para hacerse cargo de las pesquisas''.
La dependencia reconoció que en este caso ``como en otros, incluso de narcotráfico'', ha habido filtraciones ``que se han convertido en un asunto institucional muy delicado''.
Indicó que donde se han identificado filtraciones ``se ha actuado en consecuencia''. Sobre la posible renuncia del procurador Antonio Lozano Gracia, luego que fue liberado el presunto segundo tirador Othón Cortés Vázquez, la dependencia consideró que ``aunque no puede haber un beneplácito por este hecho y otros más'', debe hacerse un balance del desempeño de Lozano al frente de la Procuraduría General de la República y no juzgarlo por un solo hecho