Instalarán en las cercanías del DF tres depósitos de residuos tóxicos
Alberto Nájar A finales de este año se licitará la construcción de tres depósitos para los residuos tóxicos e industriales que se producen en el Distrito Federal. Estos depósitos tendrán un costo promedio de 40 millones de dólares cada uno y se ubicarán fuera de la zona metropolitana, informó el presidente del Consejo Nacional de Industriales Ecologistas (Conieco), Carlos Sandoval Olvera.
La licitación estará a cargo del Instituto Nacional de Ecología (INE) y del gobierno capitalino. Hasta la fecha se mantiene en secreto el lugar donde se pretende construir estas plantas, pero ``en dos semanas más se darán a conocer''. Actualmente se llevan a cabo negociaciones con los gobernadores de estados circunvecinos a la capital para obtener permiso para la instalación.
En entrevista, el líder de los industriales ecologistas comentó que la propuesta es que los depósitos se ubiquen fuera del Distrito Federal, pero lo suficientemente cerca como para trasladar los residuos tóxicos en poco tiempo. En estos lugares se recibirían exclusivamente los desechos producidos por la industria capitalina.
Según los estudios realizados por el INE, se determinó que la ciudad de México necesita por lo menos tres de estas plantas, las cuales formarían parte de una red de 88 que se instalarían paulatinamente en el resto del país. La cantidad y el tiempo en que se construirían están directamente relacionadas con la capacidad industrial de la zona. En la capital se producen cada año más de un millón 500 mil toneladas de residuos industriales y tóxicos. Para determinar el tamaño de los depósitos capitalinos basta comparar su costo: 40 millones de dólares cada uno, contra 22 millones que se invertirán en los 85 restantes.
Sandoval Olvera apuntó que no se trata de crear basureros tóxicos, sino de construir plantas de tratamiento para reciclar los residuos peligrosos y aprovechar de nueva cuenta el material en la industria. En el caso de los elementos que no puedan reutilizarse, se crearían cementerios de confinamiento, los cuales tendrían características especiales que eviten filtraciones tanto a la atmósfera como al subsuelo, además de capacidad para almacenar permanentemente cantidades importantes de material tóxico.
No se trata, aclaró, ``de mantener toneladas de basura tóxica en tambos o contenedores, sino de reciclar la mayor parte, y lo que no se pueda someter a tratamiento que se confine en lugares seguros''.
En el caso del Distrito Federal se prevé que la licitación se convoque a principios de septiembre, y a finales de año se daría a conocer a los ganadores. La construcción de los depósitos empezará en 1997 y empezarían a funcionar un año después.
Según el presidente de Conieco, ya hay varios empresarios interesados en el proyecto, e incluso ``las inversiones se podrían concretar con la visita del primer ministro japonés'', comentó.
La de los depósitos de residuos peligrosos no será la inversión más cuantiosa en materia ecológica en el Distrito Federal, pues, según Sandoval Olvera, se prevé que en los próximos meses se publique la licitación para construir plantas de tratamiento para aguas residuales, con una inversión de 800 millones de dólares
Por otra parte, el presidente de Conieco reconoció que durante el primer semestre de este año prácticamente no hubo ventas de equipo destinado a reducir la contaminación, aunque se espera que el mercado se recupere en los próximos meses. Las ventas se cayeron, explicó, por la falta de recursos de las empresas en todo el país