A más tardar en junio de 97, fin al rezago en tribunales agrarios: Zedillo

Elena Gallegos y Matilde Pérez, enviadas, Boca del Río, Ver,. 28 de agosto El presidente Ernesto Zedillo ofreció aquí, ante centenares de cenecistas, que todas ``las posesiones de tierra pacíficas y de buena fe'' efectuadas hasta antes de 1990 se regularizarán a favor de los miembros de esa central y dijo que si existen de por medio amparos ``haremos un esfuerzo extraordinario'' para compensar a los propietarios y mantener la posesión de los campesinos.

Anunció además que los tribunales agrarios resolverán en defintiva, a más tardar en junio de 1997, todos los expedientes que tengan que ver con rezago agrario, en tanto que la SRA agilizará trámites para que hasta el último asunto administrativo a su cargo quede terminado en diciembre.

Se refirió también al convenio que minutos antes había firmado la dirigente de la CNC, Beatriz Paredes, precisamente para finiquitar cuanto antes los asuntos agrarios, y aseguró que acuerdos similares se extenderán a las demás centrales que formen parte del Consejo Agrario Permanente (CAP), porque ``el gobierno de la República está con todas las organizaciones''.

Sostuvo enseguida que estos acuerdos forman parte del compromiso de su administración de vigilar que en el campo no se vuelvan a constituir latifundios y pidió a los cenecistas empezar juntos una nueva etapa de más producción, justicia y bienestar para los campesinos de México. ``Esta es la lucha de hoy y juntos vamos a triunfar'', sostuvo el mandatario.

Al clausurar el congreso nacional de la Confederación Nacional Campesina (CNC), en el local de la Expo-Ver, que las huestes cenecistas llenaron casi hasta el tope, Ernesto Zedillo ratificó su ``alianza política'' con esa central y reiteró que se saldarán ``los asuntos del pasado para poder enfrentar los problemas del presente y ver con confianza y decisión el futuro''.

El acto transcurrió entre vivas, música que coronaba las frases y estribillos de apoyo lanzados por los campesinos a la usanza priísta. Con el mismo estilo, viejos y nuevos dirigentes de la CNC --desde Hernández Posadas hasta Rodríguez Araujo--, gobernadores, senadores y diputados de extracción campesina ocuparon las primeras filas para ser testigos de honor del acto.

Los ``¡Beatriz! ¡Beatriz!'' y ``¡Zedillo! ¡Zedillo!'', seguidos de inacabables ``¡Duuuro! ¡Duuuro!'', se repitieron hasta el cansancio. No faltó el Himno Agrarista, entonado a todo pulmón por los presentes.

En ese ambiente, Ernesto Zedillo insistió en que se atenderán lo más rápido posible los mil 532 expedientes que los cenecistas tienen pendientes en todo el país y repitió que se agilizarán los trámites de los casos de expropiación de bienes ejidales por interés público.

Fue en ese momento cuando señaló que, al resolver las posesiones pacíficas a favor de los campesinos, su gobierno hará el máximo esfuerzo para que, pese a la crisis, se pueda compensar a los propietarios.

Después les pidió poner todo su entusiasmo para que el Procede avance y les garantizó que una vez obtenidos los certificados agrarios tendrán plena seguridad jurídica en sus tierras y podrán dedicarse por completo a aumentar producción y productividad.

Ernesto Zedillo aseguró que los campesinos tendrán un mejor futuro, ya que ahora tienen libertad para decidir un uso más productivo y conveniente de sus tierras. Acepotó que tanto a la CNC como a otras organizaciones campesinas les asiste a razón cuando piden acciones efectivas para capitalizar el campo.

En el presidium, escuchaban el mensaje los secretarios de Agricultura, Francisco Labastida, y de la Reforma Agraria, Arturo Warman, así como el director de Banrural, Oscar Terroba, y el gobernador Patricio Chirinos. Entre los invitados estuvieron los dirigentes de la FSTSE, Carlos Jiménez Macías; del Congreso del Trabajo, Víctor Flores; de la CCI, Alfonso Garzón Santibáñez y de la UGOCEP, Margarito Montes (líder en turno del Consejo Agrario Permanente), entre muchos otros.

Ante todos ellos el Presidente enumeró logros y objetivos de la Alianza para el Campo y los esfuerzos que se realizan para aliviar del peso de la deuda de casi 510 mil productores. ``Es cierto que este programa representa un alto costo para las finanzas públicas, pero los campesinos lo sabrán aprovechar'', dijo.

Al terminar reafirmó la ``alianza histórica'' con la CNC para enfrentar los retos y para construir un mejor futuro