El Procup desapareció al unirse al EPR-PDPR: Canseco

José Gil Olmos Felipe Edgardo Canseco Ruiz, vocero de los ocho presos del Partido Obrero Clandestino Unión del Pueblo-Partido de los Pobres (Procup-Pdlp), afirma que esta organización ``ha dejado de existir'' al integrarse al Partido Democrático Popular Revolucionario (PDPR) y al Ejército Popular Revolucio-nario (EPR), los cuales ``sí tienen base

social'' y no son ni ``terroristas ni criminales'', como los califica el gobierno, sostuvo.

``Son una fuerza armada revolucionaria que ha respondido, por el momento, con una estrategia de guerra de guerrillas'' porque se encuentra en una etapa de autodefensa y no ha declarado la guerra, afirmó.

Entrevistado en el Reclusorio Norte, luego de salir del apando donde estuvo los últimos dos días, explica que el Procup-Pdlp ``ha dejado de existir como tal'' al integrarse orgánicamente al PDPR-EPR. Esta afirmación es compartida también por Hermenegildo Torres Cruz, quien en entrevista telefónica desde el penal de Santa Martha Acatitla rechaza que el EPR sea ``brazo armado del Procup'', como afirman especialistas de Seguridad Nacional.

Canseco Ruiz fue confinado desde hace dos días al área de alta seguridad del Reclusorio Norte, luego de que el subsecretario de Gobernación, Arturo Núñez, anunció que podrían ser llamados a declarar sobre su presunta relación con el PDPR-EPR. Desde la noche del jueves y hasta el viernes por la tarde, estuvo en las celdas consideradas por los reclusos de castigo. Este sábado pudo salir a recibir visitas.

Ahí advirtió que esta podría ser ``la última entrevista'' si el gobierno insiste en vincularlos con el grupo armado. Pero como portavoz de los ocho presos del Procup-Pdlp, aclara que desde que los aprehendieron perdieron todo vínculo con esta organización ``y mucho menos con el PDPR-EPR'' dijo.

Mientras suena la música que los mismos presos tocan por ``una monedita'', Canseco precisa en primer lugar que ningún dirigente del Procup-Pdlp se encuentra preso. ``Somos pura militancia'' afirma. Después aclara que Felipe Martínez Soriano no es dirigente de esta organización y que les preocupan las amenazas que ha hecho el gobierno contra ellos y sus familiares.

Sobre las últimas afirmaciones del gobierno acerca del PDPR-EPR, Canseco Ruiz dice: ``a nosotros -siempre habló en plural- nos preocupan varias situaciones. Nosotros no somos voceros del Procup-Pdlp porque desde que nos apresaron perdimos toda vinculación. Además, desde la declaración de la Sierra Madre Oriental, el Procup-Pdlp ha dejado de existir como tal, ya que decidió con otras organizaciones (14 en total) formar otra agrupación.

``Desde el punto de vista conceptual sabemos que cuando se da un proceso de unidad revolucionaria dejan de existir cada una de las organizaciones que deciden dar ese paso y se forma una estructura que aspira ser cualitativamente superior porque trata de asimilar a cada uno de sus orígenes y las experiencias de sus errores cometidos''.

--¿Dentro de su análisis tiene base social el PDPR-EPR?

--Es imposible que exista un movimiento con las características del PDPR-EPR sin que grandes sectores de la población simpaticen con su causa. En el análisis que hacemos vemos que el accionar del EPR se encuentra en directa relación con el nivel de represión del gobierno. Sería insensato que el gobierno continuara reprimiendo a sectores del pueblo y ciudadanos ajenos a la beligerancia del EPR. Por eso podría radicalizar la operatividad urbana y rural de esta estructura revolucionaria.

``Consideramos que el gobierno, en lugar de descalificar al EPR, debe de dar lugar al análisis serio de los problemas económicos, sociales y políticos que aquejas a la sociedad mexicana y que se expresan en los 45 puntos que el PDPR-EPR dio a conocer en la declaración de la Sierra Madre Oriental y que lamentablemente la mayoría de los ciudadanos no los conocemos porque no han sido publicados íntegramente''.

Durante la charla, alrededor de la mesa donde come frijoles y huevo, otros presos platican con sus familiares y unos más venden rompecabezas que arman en sus celdas. Sobre la legitimidad del PDPR-EPR, Canseco Ruiz expone:

``Las declaraciones del gobierno de que carecen de base social, lo único que reflejan es la política del avestruz: con ocultar la cabeza pretende sustraerse de la realidad. Estamos seguros que un alto porcentaje de quienes viven en pobreza extrema, despojados por las políticas del gobierno ven con enorme simpatía la emergencia de una fuerza armada revolucionaria. Las recientes conferencias de prensa y las acciones militares del EPR reflejan la participación de por lo menos varios cientos de hombres decididos a sacrificar su vida por una causa justa que nosotros compartimos.

``Estos hombres jamás pudieron emerger sin una cantidad mucho más grande del pueblo que les diera sustento, información, redes logísticas, infraestructura, alimento y cobijo. Contrario a las declaraciones del gobierno, es evidente que el EPR cuenta con una extensa base social y con la simpatía de otras formas de lucha pacíficas que dentro de los marcos constitucionales comparten la necesidad de un nuevo gobierno, una nueva Constitución, un Congreso Constituyente y el reordenamiento de la vida económica nacional''.

A pesar de advertir que por el momento se encuentran en ``proceso de decisión'' para asumir una postura frente al PDPR-EPR Canseco señaló: ``rechazamos absolutamente que las operaciones del EPR sean de carácter terrorista. De ninguna manera consideramos que tengan como objetivo llamar la atención del extranjero. Lo que observamos es que sus acciones responden a una estrategia de guerra de guerrillas que tienen objetivos militares y policiacos, porque los militares y policías han sido las instituciones que han utilizado para reprimir a grandes sectores de la población. Además sólo actúan en autodefensa porque no han declarado la guerra''.

Negó también que sean ``criminales'', como los ha catalogado el presidente Ernesto Zedillo. ``Consideramos que un gobierno que protege o que es cómplice de los criminales que mandaron asesinar a Luis Donaldo Colosio, un gobierno que le otorga impunidad a Rubén Figueroa después de la matanza de Aguas Blancas, un gobierno que en los dos últimos años ha tenido más de 200 opositores asesinados -todos los tienen documentados-, un gobierno que habla de elecciones y cubre el fraude como en Tabasco, no tiene ninguna autoridad moral para calificar de criminales a los ciudadanos mexicanos que se han visto obligados a recurrir a las armas como recurso indispensable de autodefensa''.

Por otra parte, en una carta enviada por el colectivo de presos políticos, militantes del Procup-Pdlp -Italo y Rubén Díaz Díaz, Hermenegildo Torres Cruz, Rey Venegas Castro y Pablo Torres Hernández- desde la penitenciaría de Santa Martha Acatitla, demandaron respeto de la integridad física y moral para ellos, sus familiares y otros ciudadanos representantes de organizaciones sociales que han sido llamados a declarar por medio de 41 órdenes de presentación a raíz de las declaraciones del subsecretario de Gobernación.

``No es nuevo que el gobierno federal en su afán de justificar su incompetencia para resolver el problema de la insurgencia armada, apele a la turbia maniobra de involucrar a organizaciones democráticas y legales y a familiares nuestros con las clandestinas y armadas, buscando con ello crearse una coyuntura política para reprimir a los sectores más vulnerables e inermes del pueblo'', advierten en la misiva.

Señalan que junto con David Cabañas Barrientos y Felipe Edgardo Canseco Ruiz, son ocho los militantes del Procup-Pdlp que se encuentran encarcelados y deslindan de nuevo a Martínez Soriano.

Además, aseguran que se violan las garantías constitucionales de Cabañas Barrientos al ser trasladado al penal de alta seguridad de Almoloya, ya que en más de seis años de prisión -al igual que Canseco Ruiz- no se les ha dictado la sentencia al no poderse acreditar la ``coartada jurídica'' con que se les consignó.

Exigieron, además, que todos los miembros del EPR capturados sean tratados como ``prisioneros de guerra'', en apego a los Convenios de Ginebra.