La Jornada 1 de septiembre de 1996

En el convoy agredido iba el comandante de la XXI Zona

El Ejército Popular Revolucionario se adjudicó ayer la emboscada a un convoy militar en la carretera Villa Madero-Carácuaro, en el cual viajaba el comandante de la XXI Zona Militar de Michoacán, general de brigada Gastón Menchaca Arias.

Al mismo tiempo el grupo armado afirmó que ``el Ejército Mexicano desplegó

un operativo'' para ir en su busca, ante lo cual los guerrilleros del EPR llamaron a ``las personalidades democráticas y progresistas, a las organizaciones no gubernamentales y al pueblo michoacano que velen y estén alerta ante cualquier violación a los derechos de la población civil''.


Indígenas triquis realizaron una marcha en ese municipio
para protestar por la militarización del estado a raíz de
los ataques del EPR.
Foto: Claudio Cruz/Ap

También el EPR hizo ``un llamado al pueblo de Michoacán a incorporarse a la lucha armada revolucionaria en contra del gobierno antipopular responsable de la miseria, pobreza y represión que hoy padecemos la mayoría de los mexicanos''.

A su vez, las autoridades indicaron que en el ataque murió un soldado y tres resultaron heridos, los rebeldes aseguraron que causaron ``varias bajas'' al Ejército.

El ataque del EPR ocurrió el jueves por la mañana y fue hasta 24 horas después, por medio de un comunicado, los guerrilleros se responsabilizaron del suceso, al que autoridades michoacanas incialmente habían culpado ``a narcotraficantes''.

El director de la revista Por qué, Luis Betancourt, dijo que por medio de una llamada telefónica, alguien les dijo que fueran a recoger un mensaje escrito que habían dejado en una caseta pública.

En el comunicado, el EPR, a ``través de su comandancia'', informó que ``el día 30 del presente mes, alrededor de las 9:30 AM, en el kilómetro 35 + 700 de la carretera Villa Madero-Carácuaro, una unidad militar de nuestro ejército emboscó a dos vehículos militares, uno de tipo Hummer y a una Suburban donde viajaban elementos de la XXI Zona Militar, en el enfrentamiento le causamos varias bajas al Ejército Federal''.

Luego negaron ``categóricamente lo informado por las autoridades del gobierno del estado, en donde tratan de vincular este hecho con gavilleros o con narcotraficantes, por lo que el EPR asume totalmente la responsabilidad de tal acción y exhortamos a las autoridades gubernamentales y militares a informar con la verdad a la opinión pública''.

En su mensaje, los guerrilleros indicaron que con esta acción afirman la existencia del Partido Democrático Popular Revolucionario (PDPR) y del EPR en el estado de Michoacán, ``los cuales no tenemos nada que ver con el narcotráfico ni con la delincuencia, pues nuestros objetivos son lograr mejores condiciones de vida de los mexicanos''.

Finalmente, señalaron que ``después de nuestro accionar político-militar en la región, el Ejército Mexicano desplegó un operativo en donde participan miles de efectivos en busca de nuestras unidades militares, ante lo cual llamamos a las personalidades democráticas y progresistas, a las organizaciones no gubernamentales y al pueblo michoacano, que velen y estén alerta ante cualquier violación a los derechos de la población civil.

Por otra parte, en Morelia, fue velado Fernando Campos Hernández, de 19 años, quien murió durante la emboscada del EPR, señaló la corresponsal de La Jornada en Michoacán, Teresa Gurza.

El padre del soldado, Adolfo Campos y su hermana Alejandra, explicaron que cuando Fernando salió de su casa rumbo al cuartel de la XXI Zona Militar, les pidió no preocuparse si no regresaba en varios días, pues les habían avisado sus superiores que los iban a llevar al monte.

``Andaban en eso del combate a las drogas'', dijo don Adolfo. Agregó que siempre le decía su hijo que pensara bien si quería andar en eso, y que si no que se saliera ``pero mi muchacho me respondía que estaba a gusto y quería servir a México''.

El anciano se enteró de la muerte de su hijo hasta las 6 de la tarde de ayer, cuando ``el mayor Armendáriz me dio la razón y me dijo que mi hijo había llevado la de malas porque le había tocado la de perder'' y que fueran a recoger su cuerpo al cuartel.

``Ahora, concluyó Adolfo Campos, aunque me den toditito el dinero del mundo, no me lo pueden reponer; yo sí le pido al Ejército que se cumpla la ley y me pague a mi muchacho. Ya sólo eso queda''. El soldado será enterrado hoy.