Ataques de la guerrilla en cinco departamentos colombianos
Reuter, Afp, Efe, Ansa y Ap, Santafé de Bogotá, 9 de septiembre El presidente colombiano, Ernesto Samper, anunció hoy nuevas estrategias militares para hacer frente a la escalada de violencia por parte de la guerrilla, mientras el conflicto cocalero en el departamento de Caquetá dio lugar a nuevos choques con el ejército, que dejaron cerca de 30 soldados lesionados y varios campesinos detenidos.
En el ámbito político, el opositor Partido Conservador pidió al vicepresidente Humberto de la Calle considerar que su decisión de renunciar sólo favorecerá a Samper.
El mandatario y el alto mando militar determinaron tras una reunión que ``de acuerdo con lo requerido urgentemente'', se mejorarán factores como la recopilación de datos de inteligencia, movilidad de las tropas por tierra aire y agua, y se dará un nuevo impulso a los sistemas de comunicación para evitar nuevos ataques sorpresivos, que en los últimos diez días han dejado más de 120 muertos entre militares, guerrilleros y civiles.
En declaraciones al El Tiempo, Samper dijo que las fuerzas armadas están más preparadas para combatir que para responder a emboscadas y actos terroristas, que tienen un alto grado de impredecibilidad.
Reconoció que los recursos humanos de las fuerzas armadas son escasos para la magnitud del desafío de la guerrilla, y destacó la necesidad de mayores recursos financieros y legales para que las fuerzas militares puedan combatir eficazmente a los insurrectos.
Para superar esto, el gobierno solicitó al Congreso que apruebe una emisión de bonos de adquisición obligatoria por parte de los ciudadanos de medianos y grandes recursos, con miras a recaudar en 1997 unos 440 millones de dólares para comprar aviones, helicópteros y otros pertrechos. Analistas afirman que los recursos para el ejército alcanzan 17 por ciento del presupuesto nacional, de 22 mil millones de dólares, que aunque suficientes, no son administrados con eficiencia.
Samper afirmó que el gobierno es consciente de la gravedad de la situación de orden público, pero aseguró que pese a todas las dificultades, está bajo control.
El ejército, por su parte, denunció ante la fiscalía a los guerrilleros que el 30 de agosto atacaron la base militar Las Delicias, con saldo de 27 muertos, 19 heridos y 60 secuestrados. El general Jesús Castañeda aseguró que los rebeldes actuaron con ``sevicia y torturaron a varias de las víctimas fatales''.
Mientras, la guerrilla continúa con su actividad, y este día dejó sin energía al departamento de Putumayo debido al bloqueo de carreteras que imposibilitó la llegada de combustible para las plantas generadoras, denunció el gobernador Jorge Fuerbringer. Indicó que la situación que se vive en Mocoa, la capital, es especialmente dramática, pues la presencia de guerrilleros ha paralizado totalmente la actividad.
En los departamentos de Santander, Magdalena, Arauca y Antioquia se registraron en las últimas horas combates que provocaron la muerte de al menos nueve guerrilleros, así como un ataque con dinamita al oleoducto transandino, mientras que la Cruz Roja Internacional movilizó a varios de sus delegados a las selvas del sur del país, donde 60 soldados son retenidos como prisioneros por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
También continúa el conflicto con los cocaleros, tras la suspensión de las negociaciones con el gobierno, y este lunes, en el departamento de Caquetá se generaron disturbios que dejaron al menos 30 soldados y 12 campesinos heridos.
El ejército informó que los choques se registraron en las inmediaciones del municipio de Morelia, cuando los manifestantes intentaron cruzar un puente rumbo a la ciudad de Florencia. Los campesinos arrojaron piedras y bombas incendiarias contra las tropas, las cuales arrestaron a varios manifestantes.
``La gente está cansada'', dijo el alcalde de Morelia, Luis Cuéllar, y advirtió que el descontento ha crecido desde que el sábado se rompieron las pláticas, pero la gobernadora de Caquetá, Amparo Ossa, se trasladó a Bogotá junto con una delegación campesina para conseguir la reanudación del diálogo, que fue retomado con la participación del ministro del Interior, Horacio Serpa.
Piden al vicepresidente que reconsidere su renuncia
El presidente del Directorio Nacional Conservador, Jaime Arias, pidió al vicepresidente Humberto de la Calle que aplace su renuncia, pues esta acción sólo favorecería a Samper y serviría para tender una cortina de humo en el panorama político colombiano. Indicó que con la dimisión de De la Calle, Samper sería el vencedor, pues podría dirigir el nombramiento de ``un vicepresidente que fuera de su entera confianza''.
La renuncia de De la Calle, que, según anunció, se dará mañana ante el Senado, provocó una polémica en torno a su posible sucesor, y por lo pronto comenzaron a circular tres listas con doce nombres de posibles candidatos; el ex congresista y ex embajador en Londres, Carlos Lemos, así como el ex embajador en Washington, Carlos Lleras de la Fuente, se perfilan como los más fuertes.
Las listas para el eventual remplazo fueron sugeridas por la Asociación Nacional de Industriales, el gobierno y el propio De la Calle, para que el pleno del Congreso decida, de acuerdo con la Constitución. Lleras y Lemos coinciden en las tres listas. Según la revista Semana, Lemos saltó sorpresivamente al escenario político, y de ser elegido por el Congreso, no se descarta incluso que suceda a Samper, pese a que éste se ha negado a renunciar.