ENFRENTAMIENTO EN SAN COSME

Miriam Posada y Gustavo Castillo La guerra por las calles comenzó. Ayer dos grupos de comerciantes ambulantes se enfrentaron a golpes en Ribera de San Cosme e Insurgentes.

La conquista de calles ajenas al Centro Histórico provocó que los dirigentes Christian Pichardo y Miguel Angel Huerta apoyados por casi 300 personas, se enfrentaran con los ambulantes de San Cosme en busca de apoderarse de la acera norte de esa avenida.

Por lo menos 20 heridos dejó la espectacular gresca
entre dos grupos de comerciantes callejeros en la
avenida Ribera de San Cosme, cerca de Insurgentes
Norte. No hubo detenidos. Fotos: Alfredo Estrella

En días pasados las dirigentes Dolores Aguirre y María Pantoja advirtieron al subdelegado Jurídico y de Gobierno de la delegación Cuauhtémoc, Carlos Vega Memije, sobre el posible choque entre ambos grupos. El funcionario desestimó la observación y autorizó el pasado martes a Antonio Romero, quien labora también en la demarcación, que permitiera la instalación de 55 puestos en la zona, la cual se convirtió por más de dos horas en campo de batalla.

El resultado de lo que el dirigente Miguel Angel Huerta calificó como ``la primer batalla por conquistar territorios'', fue de al menos 20 lesionados, 10 vehículos dañados e igual número de comercios afectados, por lo que el presidente de la Cámara Nacional de Comercio del Distrito Federal (Canaco), José Santos Asseo dijo que solicitaran al DDF que los ambulantes abandonen las calles.

La batalla entre miembros de la Unión Independiente de Comerciantes de San Cosme y los agremiados de Christian Pichardo y Miguel Angel Huerta, abarcó de Insurgentes a Sadi Carnot. Armados con palos, piedras, tubos, botellas y navajas, ninguno de los grupos tuvo clemencia de sus rivales.

La historia comenzó alrededor de las 17:30 horas, cuando Aguirre y Pantoja intentaron dialogar con Pichardo y Huerta; sin embargo, los agremiados de los dirigentes que vendían en el Centro Histórico se fueron sobre los ambulantes de San Cosme.

Como respuesta, los miembros de la Unión Independiente de Comerciantes cruzaron la calle y arrastraron los 55 puestos hasta el camellón, por lo que en la trifulca se perdió mercancía por un valor aún no estimado.

La avenida San Cosme desde Insurgentes hasta Serapio Rendón fue escenario de tres enfrentamientos.

A su vez Pantoja tuvo que ser protegida por sus agremiados para que la gente de Pichardo y Huerta no la golpearan cuando se acercaron a reclamarle la ``agresión''. Después se refugió en su casa hasta que llegaron representantes de la delegación.

Huerta también dijo que la delegación le otorgó un permiso a Pichardo para instalarse en el lugar, y aclaró que Alejandra Barrios y su agrupación no tenían que ver en el asunto; sin embargo, los vendedores aseguraron que el hijo de la lideresa, y El Cary, uno de sus guardaespaldas, participaron en el enfrentamiento.

A pesar de que hubo presencia de patrulleros del sector 3 desde el inicio de la batalla, los ánimos se calmaron hasta que llegaron cerca de 200 granaderos que se distribuyeron sobre el camellón de Ribera de San Cosme.

Dolores Aguirre y María Pantoja señalaron que tienen más de 20 años de trabajar en ese lugar y que la acera norte sólo la ocupan durante la temporada navideña. Además, explicaron que para ellos representa una desventaja que los comerciantes con los que se surten se instalen a tan corta distancia.

Después de casi tres horas de haber iniciado el conflicto, las dos dirigentes sostuvieron una plática con Enrique Hidalgo, quien se identificó como funcionario de la subdelegación Jurídica y de Gobierno, y luego como jefe de Vía Pública.

La reunión fue infructuosa, ya que las dirigentes se negaron a concertar con ``los invasores''. María Pantoja le dijo al funcionario ``usted sabe que los lugares no nos costaron 10 pesos, y también sabe que las autoridades sólo dan permisos de palabra'', lo cual aceptó Hidalgo.

El funcionario no logró que las dirigentes aceptaran la presencia de los ambulantes ``reubicados'', por lo que podría haber más enfrentamientos