Liberación de 67 soldados, demanda Samper a guerrillas

Afp, Ap, Efe, Dpa, Ansa y Reuter, Santafé de Bogotá, 17 de septiembre El presidente colombiano, Ernesto Samper, llamó hoy a las guerrillas de su país que liberen ``sin humillaciones'' a los 67 soldados que mantienen prisioneros, y las instó a demostrar su voluntad de paz poniendo fin a la ofensiva armada que ha lanzado a lo largo de este mes.

En paralelo, el mandatario venezolano Rafael Caldera aseveró que su gobierno no tiene nada que negociar con la insurgencia colombiana, al salir al paso de una presunta propuesta de diálogo por parte de los grupos irregulares. Apuntó que Venezuela lo único que pide a quienes actúan con violencia en el vecino país es que eviten atacar en su frontera.

Samper dijo que el gobierno colombiano está pidiendo a las guerrillas más hechos que declaraciones, porque la voluntad de paz ``no se ve por ninguna parte''. Por ello, demandó la liberación inmediata de los 67 soldados sin someterlos a la ``humillación'' de un proceso publicitario, y atenerse únicamente a las leyes humanitarias.

Samper también pidió a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que ``terminen la guerra terrorista'' que lanzaron en las últimas tres semanas, que ha dejado más de 120 muertos, decenas de heridos y unos 40 vehículos destruidos en el marco del paro forzado en las carreteras de vastas regiones del país.

Las FARC dieron a conocer un comunicado en el que denuncian que los grandes operativos militares desplegados por el ejército en el sur de Colombia, ``hacen imposible la pronta entrega'' de los prisioneros de guerra. Añadió que tales operativos, además, ``ponen en grave peligro la integridad física de los mismos''.

El ministro de Defensa, Juan Carlos Esguerra, expuso que no hay duda de que las FARC están obteniendo protagonismo con las ofertas incumplidas de liberar a los soldados. Reiteró que el ejército sólo está listo para despejar la zona o zonas que indique la guerrilla para concretar la liberación, pero insistió en descartar una zona de distensión o retirada militar. Las guerrillas, que demandan la desmilitarización de una zona para liberar a los soldados, criticaron que Samper haya ``movido cielo'' para la liberación de Juan Carlos Gaviria, hermano del ex presidente César Gaviria, secuestrado por paramilitares en junio, incluyendo los buenos oficios de Cuba, y hoy se muestre renuente a ello.

La víspera, medios periodísticos venezolanos difundieron la versión de que las FARC habían planteado al gobierno de Caldera negociar para evitar roces en la zona fronteriza. Pero el ministro del Interior, José Guillermo Andueza, desmintió que hasta el momento se haya recibido una propuesta como la señalada.

Durante un acto ante militares venezolanos, Caldera puntualizó: ``No tenemos nada que negociar; nosotros no estamos en guerra con los guerrilleros colombianos. Subrayó que ``el problema político de Colombia, la existencia de una guerrilla por motivaciones supuestamente ideológicas, no nos concierne''. Y pidió que Venezuela no sea agredida.

Por su parte, la comandancia de la V División del ejército negó que las FARC mantengan un cerco en torno a Santafé de Bogotá, como afirman algunos medios de prensa. El general Fernando Tapias dijo que esos comentarios solo sirven de caja de resonancia a los grupos rebeldes ``en sus planes de crear pánico e incertidumbre''.

Normativa contra narcos

El presidente Ernesto Samper solicitó hoy al Congreso aprobar con urgencia dos normas encaminadas a combatir el narcotráfico. La primera se refiere a un aumento en las penas por narcotráfico, y la segunda, a la posibilidad de expropiar los bienes originados en el tráfico de drogas.

Mientras Samper anunciaba, además, una inversión de 20 millones de dólares destinados a la lucha antisecuestros, algunos sectores políticos estimaban que tales propuestas resultan fundamentales para que Estados Unidos reconsidere su punto de vista sobre la lucha antinarcóticos colombiana y para que el próximo año conceda la llamada ``certificación'' antidroga al país sudamericano.

A su vez, el embajador estadunidense, Myles Frechette, se manifestó satisfecho por lo que calificó de lucha ``firme'' en el combate contra plantaciones de cultivos ilícitos en Colombia. Si bien dijo que está en estudio el rendimiento de ese lucha emprendida por el gobierno de Samper, anotó que aún no se descarta la imposición de sanciones a este país.