Varios artistas acuerdan crear el Barzón de las Estrellas

Alberto Nájar Porque los bancos y sus intereses también afectan al mundo de la farándula, ayer Ana Colchero y Demián Bichir, protagonistas de la telenovela Nada personal, se declararon en moratoria pues ya no pueden pagar las mensualidades de los departamentos que habitan.

Y no son lo únicos, pues junto con Camila de los Reyes y Alfonso Carbajal, otros artistas decidieron unirse para formar El Barzón de las Verdaderas Estrellas, donde participan personajes como Ella Laboriel, Margie Bermejo, Juan Torres, Judy Furlong y Carlos Bracho.

Todos comparten el mismo problema: que ya no pueden pagar sus créditos hipotecarios y se niegan a reestrucurar en Udis. Incluso Ana Colchero expuso --en conferencia de prensa-- que fracasó el programa para renegociar los adeudos pendientes, pues a una semana de que concluya solamente 300 mil personas han reestructuado de un total de 900 mil, además de que una tercera parte ya volvió a caer en cartera vencida.

La actriz tiene contratado con Banamex un crédito hipotecario, el cual ya no puede pagar por el incremento ``excesivo'' de las mensualidades, que ascienden a 7 mil pesos. Con asesoría de El Barzón Metropolitano, Ana Colchero paga ``lo justo'' a través de billetes de consignación de Nacional Financiera.Lo mismo hace Demián Bichir, quien también tiene una deuda con Banamex. Juan Torres le debe a Banca Promex e incluso enfrenta un proceso judicial en su contra, pues la institución pretende embargarle una residencia valuada en 500 mil pesos que se ubica en Querétaro.

Los artistas denunciaron la usura bancaria y el terrorismo que se aplica contra ellos, al igual que sucede, indicaron, con otros miles de deudores. Por eso exigieron que se amplíe el periodo de reestructuración para los créditos hipotecarios, y además presentaron una propuesta para liquidar las deudas:

Cancelar los intereses moratorios que se acumularon de manera ilegal, crear un sistema de pagos que tenga como base el ingreso familiar y del cual sólo el 30 por ciento se destine a los bancos; establecer un periodo de gracia de cuatro meses para los desempleados, condonar adeudos a los jubilados y que el gobierno ``utilice su influencia'' para ayudar a solucionar este problema.