El gobierno asume costos inmediatos pero trabaja a largo plazo, dice Espinosa

Víctor Ballinas El jefe del Departamento del Distrito Federal, Oscar Espinosa Villarreal, aseveró ayer que las autoridades ``nos hemos decidido a gobernar con responsabilidad y con visión de largo plazo, a trabajar más allá de la coyuntura, y asumir todos los costos en el corto plazo.

Aunque esta administración no inaugure las obras que está construyendo, señaló Espinosa Villarreal, como será ese complejo de tratamiento de agua más grande del mundo, ni la línea ``B'' del Metro, que se inaugurará en 1997, sin embargo, ``sí hemos tomado todas las decisiones para garantizar que eso exista, y que en función de ello tengamos una ciudad mejor para los próximos años''.

Algunos de los integrantes de los Consejos Asesores del Departamento del Distrito Federal, invitados al Seminario La viabilidad urbana de la ciudad de México, luego de escucar el mensaje del regente, comentaron que ``esto más bien parece un acto de despedida. Un adiós y, bueno, hay que ver qué pasa, comentaron algunos de los inmobiliarios presentes en el desayuno-sesión de trabajo.

Espinosa Villarreal lamentó que la nota en el seminario, en la sesión del lunes, ``fue más las marchas que la reforma profunda que la ciudad está viviendo para garantizar su viabilidad política de mediano y largo plazo''.

También dijo que en la siguiente sesión, la del martes pasado, cuando se trataron temas como educación, salud, empleos, la nota fueron los impuestos o los subsidios, pero de inmediato matizó: y esto es natural, es pate de la misma acción de la comunicación.

Previo a la intervención del regente, el secretario de Obras, Daniel Ruiz Fernández, subrayó que no basta con mantener operando la infraestructura con que cuenta la ciudad en las mejores condiciones, sino que hay que construir la que requerirá la ciudad en un futuro inmediato.

Ruiz dijo que los programas de obra, de operación y mantenimiento de la infraestructura de la ciudad se realizan con la intensidad y el ritmo que permiten los recursos asignados a estos fines, sin embargo, es conveniente señalar que de contar con mayores asignaciones presupuestales, algunos programas podrían ser acelerados y con ello mejorar la calidad de vida.

El funcionario destacó que en las obras de la capital se destinan 92 centavos de cada peso directamente a la inversión, y los ocho centavos restantes se dirigen a la administración, proyecto y supervisión de las obras.

A su vez, el secretario de Transporte y Vialidad del Departamento del Distrito Federal, Jorge Ramírez de Aguilar, dijo que el padrón vehicular revela que en la ciudad hay 22 mil 834 microbuses, 4 mil 120 vagonetas, 126 autobuses concesionados, 77 mil 650 taxis de transporte individual y más de 9 mil 249 taxis de sitio.

Ramírez de Aguilar apuntó que ``hay rezagos que subsisten en el autotransporte que utiliza como fuente de propulsión la combustión interna, y que habrán de ser superados ahora que ya existe un nuevo marco legislativo y regulatorio que posibilita la modernización''.

Se debe reconocer, apuntó, que hay factores ajenos a la decisión y a la capacidad de incidencia del gobierno capitalino que aceleran o difieren la modernización que pretendemos en este tipo de transporte. La fluidez de crédito hacia el sector es un ejemplo de lo antes señalado