La Jornada 28 de septiembre de 1996

Continúan los disturbios en Israel; ayer, 8 muertos y decenas de heridos

Afp, Ap, Ansa, Dpa y Reuter, Jerusalén, 27 de septiembre Al menos ocho muertos y decenas de heridos fueron el saldo del tercer día consecutivo de enfrentamientos entre el ejército israelí y la población y policía palestinas en territorios autónomos; el enfrentamiento más grave ocurrió en la mezquita de Al Aqsa, donde los uniformados israelíes dispararon contra feligreses palestinos, tres de los cuales resultaron muertos y otros 50 heridos.

El gobierno conservador del primer ministro Benjamin Netanyahu desplegó soldados a lo largo de su frontera con la franja de Gaza y a 4 mil policías suplementarios en Jerusalén. Envió tanques y tropas a las afueras de los pueblos palestinos, uno de los cuales fue blanco de ataques de helicópteros artillados israelíes.

Tel Aviv anunció que la ampliación del túnel que pasa por debajo de la explanada de las mezquitas en Jerusalén será detenida hasta el domingo, luego de que el presidente palestino, Yasser Arafat, condicionó un encuentro con Netanyahu al cierre del túnel, que originó los enfrentamientos. El jueves, Netanyahu desoyó sugerencias estadunidenses de cerrar el túnel.

Fuentes israelíes dijeron que aún no se ha acordado la reunión entre Arafat y Netanyahu, pero indicaron que podría realizarse el domingo en El Cairo, con la mediación del presidente egipcio Hosni Mubarak. Voceros estadunidenses informaron que podría ser el sábado.

El secretario de Estado estadunidense, Warren Christopher, se comunicó durante el día con numerosos líderes de Medio Oriente para discutir posibles soluciones. El Departamento de Estado admitió que Christopher no había logrado contactar a Arafat ni pudo constatar si Israel había tomado ``medidas prácticas'' para aligerar la tensión.

Francia, Gran Bretaña y Alemania enviaron hoy a Netanyahu y a Arafat un mensaje ``común y solemne'', en el cual los instan a reunirse lo antes posible y a reanudar negociaciones.

Pero durante una conferencia de prensa, Netanyahu negó que Israel sea responsable de de la violencia en Gaza y Cisjordania, y afirmó que no se llegará a ningún acuerdo entre Tel Aviv y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) bajo la presión de los disturbios. Dijo haberle afirmado a Arafat, en conversaciones telefónicas que sostuvo el jueves, que la base de los acuerdos de paz israelíes-palestinos es ``olvidarse de la guerra'', y le reiteró que Israel está dispuesto a proseguir negociaciones de paz.

Guerra de palabras

Netanyahu rechazó las críticas contra el túnel, y afirmó que su gobierno decidió su ampliación por estar seguro de que no dañaría la sensibilidad religiosa palestina; afirmó que la reacción violenta de los árabes no fue espontánea, sino dirigida por la ANP. Agregó que Palestina violó los acuerdos que prohíben que armas a disposición de sus fuerzas de seguridad sean usadas en contra de israelíes.

El jefe de la policía israelí, Asaf Hefetz, admitió que esperaban una reacción a la ampliación del túnel, aunque no tan violenta.

El jefe del Estado Mayor israelí, Amnon Lipkin Shakak, quien ayer dijo que Tel Aviv no excluye retomar el control militar en zonas autónomas palestinas, coincidió en que las protestas fueron orquestadas por la ANP, y calificó de inaceptable que la policía palestina dispare contra soldados israelíes. Otros miembros del gobierno israelí reafirmaron la teoría de que la ANP alentó las protestas a fin de presionar a Netanyahu a hacer concesiones.

El martes, Arafat llamó a los palestinos a manifestarse contra de la ampliación del túnel, aunque el jueves pidió detener las provocaciones contra soldados israelíes. Durante el día, la radio palestina transmitió un mensaje de Arafat en el que llama a continuar la protesta contra el túnel, pero pacíficamente.

No obstante, Arafat ordenó a los 30 mil hombres que conforman la fuerza policiaca palestina disparar contra soldados israelíes sólo en defensa propia, o cuando estos ataquen a civiles que les arrojan piedras.

Arafat condenó hoy los enfrentamientos en la mezquita de Al Aqsa, donde se disparó contra miles de feligreses que arrojaron piedras contra soldados israelíes que custodiaban el lugar, y causaron la muerte a tres palestinos e hirieron a 50. Señaló que el jueves Netanyahu le aseguró por teléfono que trataría de mantener la calma en Jerusalén.

Fuentes del ejército israelí aseguraron que en Al Aqsa se usaron balas de goma y gases lacrimógenos para dispersar a la multitud, pero testigos aseguraron que dispararon fusiles.

Arafat aseguró hoy que ``tarde o temprano'' Palestina recuperará Jerusalén como capital de su Estado independiente, y llamó a los ``cristianos y musulmanes del mundo'' a salvaguardar sus lugares sagrados en Jerusalén y evitar así la judaización de la ciudad.

También instó a Estados Unidos a que una vez celebradas las elecciones de noviembre, juegue el papel de patrocinador de lsa negociaciones a lado de Rusia y la Unión Europea.

Un comunicado de la Delegación Especial Palestina en México afirma que desde la llegada al poder de Netanyahu, Israel no cumplió con los acuerdos de paz al no retirar a sus tropas de Hebrón, mantener un bloqueo de ocho meses en territorios palestinos y conservar el control sobre la dotación de agua.

Violencia en territorios autónomos

Helicópteros artillados israelíes dispararon contra el pueblo de Rafah, cerca de la frontera entre Gaza y Egipto, luego de que un coronel israelí murió en un combate con la policía palestina y manifestantes civiles. Según fuentes médicas, resultaron heridos más de 40 palestinos y mil residentes abandonaron sus casas. Fuerzas de seguridad de El Cairo dijeron que uno de sus policías fronterizos murió al ser alcanzado por los disparos.

En la localidad cisjordana de Tulkarem dos soldados israelíes y un palestino murieron en un tiroteo, y en Jericó, dos palestinos perecieron y otros 11 resultaron heridos cuando atacaron a pedradas un puesto militar israelí.

En Ramallah, donde el miércoles soldados israelíes ingresaron por primera vez a zonas autónomas para sofocar las protestas, la policía palestina impedió que un grupo de jóvenes atacara un puesto militar israelí. También hubo choques en Belén, Nazaret y Kalkilya.

En Nablus, soldados israelíes, rodeados por manifestantes y la policía palestina en la Tumba de José, fueron relevados hoy tras un acuerdo entre responsables palestinos y el comando castrense israelí, el cual descartó que los soldados abandonen este lugar santo al que acuden a rezar colonos israelíes. En Gaza, 2 mil personas se manifestaron en el campamento de refugiados de Jhan Yunes tras la muerte de cuatro palestinos la víspera.

Las cifras de muertos en los tres días de disturbios que se reciben de distintas fuentes en territorios palestinos son contradictorias. El jueves fuentes médicas calcularon que 80 personas habían muerto, en su mayoría palestinos, pero informes de hoy dijeron que había en total 69 muertos y alrededor de mil heridos, y coinciden en que la mayoría de las víctimas son palestinas. Fuentes hospitalarias coinciden en que el número de muertos aumentará pues hay muchos heridos de gravedad.

El Consejo de Seguridad de la ONU reanudó hoy el debate sobre la violencia en los territorios palestinos con un nuevo proyecto de resolución, luego que se eliminó uno egipcio que condenaba a Israel y exigía el cierre del túnel en Jerusalén, luego de que Estados Unidos amenazó con vetarlo. En la sesión, la embajadora estadunidense ante la ONU, Madeleine Albright, aseguró que una condena hacia una sola de las partes ``alienta el extremismo''.