Abstencionismo, seguro vencedor en comicios
José Gil Olmos, enviado, Acapulco, Gro., 27 de septiembre Ante la virulenta situación prevaleciente en la entidad, avivada con el surgimiento del Ejército Popular Revolucionario (EPR) y la militarización en la sierra sur y montaña guerrerenses, el sacerdote Orbelín Jaramillo advirtió: ``Si el gobierno quiere solucionar la violencia con la violencia, creo que haremos un infierno de este estado, hacia allá esta empujando la situación''.
Señalado en el gobierno de Rubén Figueroa Figueroa como fundador e ideólogo de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) -grupo que ha sido implicado con el EPR-, porque algunos de sus catequistas se sumaron a esa agrupación, el ex párroco de Coyuca de Benítez manifestó su preocupación frente al escenario prelectoral y afirmó que el único ``vencedor'' en la contienda será el abstencionismo.
Acapulco, Guerrero. Orbelín Jaramillo, teólogo de la
liberación, acusado de ser ideólogo de la OCSS.
Foto: Francisco Olvera
Entrevistado en su nueva parroquia ubicada en la colonia Zapata, una de las más inseguras del puerto, luego de haber realizado su labor pastoral en Coyuca y Atoyac, el religioso consideró que el EPR difícilmente establecerá un dialogo con el gobierno, porque su propuesta por un Estado de transición es radical, ``no negociable''. Por ello, sentencia, ``el problema va para largo''.
El joven sacerdote, originario de Tecpan de Galeana, dijo haberse formado bajo la teología de la liberación en Tehuacán, Puebla. Así, criticó las medidas gubernamentales de aumentar la presencia militar donde han aparecido grupos del EPR. ``Si la violencia de Aguas Blancas generó el levantamiento armado (EPR), la violencia que continúa el gobierno generalizará la violencia en Guerrero y en el país'', dijo.
A escasas dos semanas de los comicios electorales del 6 de octubre, Orbelín Jaramillo indicó que la situación en Guerrero es ``preocupante'', por la actuación de las fuerzas militares y policiacas que participan en los operativos de contrainsurgencia. Sobre todo, sostuvo, porque ``se han violado los derechos humanos de la ciudadanía.
``El presidente Ernesto Zedillo dijo que no se iba a afectar a terceros, pero en realidad están deteniendo a gente inocente, culpándola, a campesinos y trabajadores. La gente vive en una zozobra permanente'', insistió en señalar el padre guerrense, y rechazó el uso de la violencia.
``Ciertamente, la situación que ha generado esta violencia es la marginación y el olvido en que ha vivido el estado, y en especial la sierra. Sabemos que la violencia nunca será el camino de la paz, que sólo traerá más violencia, como lo estamos viviendo y constatando. Sin embargo, pues cada quien es libre de expresar sus sentimientos y pensamientos como mejor convenga. Hay gente que lo hace por la vía electoral, otros por organizaciones no gubernamentales o de campesinos, como la OCSS, y otros que toman el camino de la radicalidad, como el EPR'', dijo.
No obstante, aseguró que la aparición del EPR ha dado pie al gobierno para acusar ``a todos aquellos que se organizan para defenderse'', y los asocia con este grupo armado. Así, apuntó, se ``tilda'' de guerrilleros a ciudadanos, a miembros de organizaciones campesinas y civiles, de partidos de izquierda, ``toda persona que tenga un pensamiento crítico es acusada y detenida, hostigada y frenada''.
Incluso, siente que la seguridad de varios sacerdotes, incluido él, está en peligro. El sábado 21 de septiembre pasado, las instalaciones de la iglesia donde oficia desde hace apenas dos meses y medio fueron allanadas, y en el piso de tierra aparecieron huellas de botas. Antes de esta acción, Jaramillo decidió percnotar en una casa, en el centro del puerto de Acapulco.
--¿A usted, de qué lo acusan?
--Desde el tiempo de (Rubén) Figueroa me acusaban de ser el responsable del nacimiento de la OCSS, y de tener relación con esa organización, lo cual desmentí en su momento. Como párroco de Coyuca, a veces trabajaba en Paso Real y Atoyaquillo, y por mi trabajo con los catequistas, que después se sumaron a la lucha de esta organización, por todo eso me acusaban de ser el ideólogo de la OCSS. Yo dije en ese tiempo, que estaban buscando a culpables, a un chivo expiatorio para toda esta violencia que se está viviendo.
-¿Que opina del EPR?
-El EPR es toda una organización armada que se estuvo gestando desde la década de los 70, es el resurgimiento de una lucha que estuvo incubada y esperando las condiciones para emerger, y que aprovechó la situación del vado de Aguas Blancas para hacerse presente. Por eso no es algo que nació en Coyuca ese día, es algo que tuvo tiempo de existir clandestinamente, que desde la oscuridad se organizó y buscó subsidios. Emergió ante una falta de justicia, que no llegó hasta donde se necesita. No vivimos en un Estado de derecho, vivimos en un Estado de barbarie, donde cada quien se hace justicia con sus propias manos. Estamos ante un Estado que se desbarata cada vez más por la violencia.
Según el sacerdote, de unos 40 años de edad, la situación de pobreza que vive el país es consecuencia ``lógica'' del sistema neoliberal que ha escogido el gobierno, la cual, sostuvo, trata de poner al país en las manos de la inciativa privada nacional y extranjera. Por ello, dijo que para mejorar la situación tendrá que cambiarse este sistema capitalista.
-¿Cómo podría darse este cambio?, ¿por las elecciones?
-La gente no cree ya en las eleccciones, están arregladas, a pesar de que se ha dicho que no se van a repartir dádivas; en algunas colonias se están repartiendo paquetes, se recogen firmas y se presiona por un solo partido.
``En Guerrero, dijo, el abstensionismo es el que va a ganar, porque ya no cree en la democracia electoral, porque siempre se han utilizado los mismos métodos fraudulentos. El voto, ni es libre ni es secreto, hay presiones y chantajes. Nadie cree en eso. Yo tampoco'', precisó.
El religioso reconoció que su postura social y política le ha traído constantes ``llamadas de atención'' de sus superiores. Empero, ``uno no puede callar la verdad, ni lo que se siente, porque tenemos derecho de opinión'', acotó.
-¿Cómo observa el escenario?, ¿recomendaría el dialogo entre el EPR y el gobierno, como lo hace con el EZLN?
-Lo ideal sería el dialogo, pero siento que el EPR es más radical que el EZLN, está más extendido a nivel nacional, y como que el problema va para largo. Veo que no está dispuesto a negociar con el gobierno, mientras no se cumpla con el Estado de transición que piden, un gobierno interino, y luego buscar un gobierno democrático. Entonces, su tendencia y su proyecto de país parece ser muy radical, no negociable, y así como esperaron tanto tiempo para emerger, esperarán más tiempo para lograr lo que quieren.
``Sé que lo ideal es el dialogo, dijo, pero las condiciones son difíciles, porque el EPR es una guerrilla urbana-campesina que sigue en la clandestinidad, muy difícil de desmantelar, porque está bien planeada y bien hecha. Cuántas veces el Ejercito no quedó en ridículo, como en Chilpancingo, cuando aparecieron y movilizaron a muchos efectivos, pero nunca encontraron a nadie. Han dado muestras de que conocen muy bien el terreno y que tienen estrategia bastante inteligente, que saben desde el 28 de junio hasta hoy, atacar y retroceder.
``Creo que no se está tratando con niños ni con aprendices, son gente muy capaz y dispuesta a todo. Siempre he dicho que el problema debe ser tratado con la magnitud que representa, porque hacer lo mínimo o ridiculizarlo, es desconocer la magnitud del enemigo'', concluyó el prelado, quien declinó opinar sobre las afirmaciones de que el EPR es ``una pantomima''