A pago de réditos, 89.5% de ingresos petroleros de los últimos diez años
Juan Antonio Zúñiga M. El 89.5 por ciento de los ingresos netos de divisas aportados por Petróleos Mexicanos (Pemex) a la economía nacional entre 1986 y 1996, nuevamente fueron enviados al exterior para cubrir el pago de los intereses de la deuda externa del sector público en el mismo periodo, indican informes de esta paraestatal y de las secretarías de Energía y de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Para el pago de los intereses generados por su endeudamiento externo, el gobierno mexicano destinó 68 mil 600 millones de dólares, para lo cual se emplearon nueve décimas partes de los 76 mil 637 millones de dólares que aportó la balanza comercial de esta paraestatal, que se ha visto sometida a extraer mayores cantidades de crudo hasta reducir en 8 mil 842 millones de barriles el volumen de las reservas de hidrocarburos en la última década; esto es, el 12.5 por ciento de las que contaba en 1986.
De acuerdo con la Secretaría de Energía, las reservas de hidrocarburos a comienzos de 1986 se situaban en 70 mil 900 millones de barriles, que bajo el ritmo de explotación de ese año garantizaban 54 años de suministro. Para 1996 las estimaciones de esta dependencia gubernamental las situaron en 62 mil 58 millones de barriles, con una duración para 48 años.
Prácticamente dedicada a la producción de crudo y con bajos niveles de inversión hacia la diversificación en el procesamiento de este energético, Petróleos Mexicanos no sólo es la empresa de mayores dimensiones del país, sino que se ha mantenido como la columna vertebral del manejo financiero del sector público en la última década, a pesar de que sus exportaciones representan en la actualidad el 9 por ciento de la venta externa de mercancías de origen nacional.
Una empresa altamente rentable que, según sus propios informes, reportó un rendimiento de 9 mil 800 millones de dólares al término del primer semestre de 1996, antes de deducir el pago de impuestos y derechos que implicaron erogar 6 mil 665 millones de dólares al erario público.
Esta cantidad representó el 68 por ciento de la utilidad de operación de Pemex, y el 29.6 por ciento del monto total de los ingresos presupuestales del gobierno federal en el mismo tiempo, los cuales fueron de 168 mil 919.4 millones de pesos.
Por sí solos, los pagos por ``derechos'' efectuados por Pemex en la primera mitad de este año superaron en 11 por ciento a los recursos obtenidos por el fisco a través de la aplicación del Impuesto Sobre la Renta, el principal gravamen del sistema tributario mexicano, lo que ha colocado a esta paraestatal desde hace más de 10 años como el más importante contribuyente del gobierno federal.
Además, la disponibilidad de divisas por la exportación de crudo le ha permitido al gobierno federal hacer frente al pago de los intereses de una deuda externa en continua elevación, que al término de junio pasado ascendía a 98 mil 484.8 millones de dólares, según la Secretaría de Hacienda; cantidad equivalente al 66 por ciento de los 148 mil millones de dólares en que los expertos del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM estiman el valor de Pemex a precios de mercado.
Sin embargo, la aportación de divisas a la economía mexicana por parte de Pemex no ha sido igual para sus tres principales ramas de actividad.
En la extracción de crudo su resultado ha sido superavitario, al grado de que de los 24 mil 400 millones de dólares que obtuvo esta paraestatal por ventas durante 1995, 10 mil 100 millones, 41.4 por ciento, se derivaron de exportaciones.
La balanza petrolífera es negativa desde 1989, debido a que las importaciones de gas licuado, gasolinas, diesel y turbosina, entre otros, han superado ampliamente a las exportaciones de estos energéticos refinados. El saldo de 1986 a 1996 es deficitario en 3 mil 759.8 millones de dólares, según la Secretaría de Energía.
Mientras, la balanza comercial de productos petroquímicos ha sido superavitaria desde 1987, al grado de que en la década considerada, este sector bajo la férula estatal de Pemex aportó mil 948.5 millones de dólares a la economía mexicana al superar en esa cantidad las ventas externas a las importaciones realizadas.