Retiró Pinochet cargos a Gladys Marín; ``triunfó la verdad'', dijo ella
Enrique Gutiérrez, corresponsal, y agencias, Santiago, 31 de octubre La secretaria general del Partido Comunista de Chile, Gladys Marín, recuperó hoy su libertad en forma incondicional luego de que el ex dictador Augusto Pinochet se desistió de la querella que había interpuesto por presuntas injurias y calumnias en su contra.
``Lo que el ejército ha hecho es demostrar que ha sido derrotado porque no tenía la verdad'', declaró Marín al salir del palacio de los tribunales, donde fue vitoreada por una multitud que la esperaba y que desde su detención, el martes pasado, emprendió una serie de movilizaciones de protesta en demanda de su liberación.
La dirigente, a quien previamente la Corte Suprema de Justicia había decidido otorgarle la libertad bajo fianza, apuntó que éste ha sido ``un gran triunfo'' que demuestra la verdad en todas sus críticas al jefe del ejército. Por ello, subrayó que el gobierno tuvo además que reconocer la gran presión internacional.
Trascendidos en los tribunales indicaban que Pinochet se desistió de la querella, presumiblemente a petición expresa del ministro de Defensa, Edmundo Pérez Yoma. ``Quien sea que lo haya hecho, aquí simplemente ha sido la fuerza de la verdad y la razón'', comentó, sin embargo, la ex parlamentaria y esposa de un detenido-desaparecido.
Marín expresó su agradecimiento a la gente noble de Chile que de inmediato se movilizó en su favor por la forma en que ella fue detenida, pero también protestando por lo que definió como el ``fondo''. Dijo que éste es que Pinochet se permite seguir querellándose contra toda la gente, aun cuando son miles quienes han sido agredidos en este país.
Pero al tiempo que esto ocurría, agentes de la policía militarizada de Carabineros llegaron a la sede del PC para cumplir una orden judicial de embargo de diversos bienes del partido. De este modo, se hizo efectiva una orden de los tribunales emanada de uno de los cuatro procesos que afectan a la sede de esa colectividad.
El dirigente comunista Jorge Insunza explicó que el problema se origina a raíz de que el local partidario fue transferido a un militante del partido durante el régimen pinochetista, con objeto de evitar su expropiación. Con el tiempo hubo otras transferencias similares, hasta que murió un cuarto propietario del inmueble cuya hermana convirtió el bien del partido en propiedad personal y llevó esto a un juicio.
Por otra parte, la Corte Suprema chilena rechazó una amnistía general para los militares que violaron los derechos humanos durante el régimen del general Pinochet, durante el cual se sabe que murieron unas 3 mil 200 personas. Los militares habían pedido la absolución masiva apoyándose en la ley de amnistía de 1978, emitida por el antiguo régimen militar. El Ministerio Público Militar también basó su demanda en la ``inquietud inconveniente'' que había en las filas castrenses por los 200 procesos por crímenes de lesa humanidad que llevan los tribunales.
La decisión judicial, inapelable, fue adoptada por 14 votos contra uno. El fallo asienta que ``los jueces son independientes para resolver los preceptos y de qué modo deben aplicarse a las causas que son sometidas a su conocimiento, sin que sean admisibles injerencias externas''. Esta decisión fue considerada ``positiva'' por el líder del mayoritario Partido Demócrata Cristiano, Alejandro Foxley, quien dijo que cada caso debe investigarse a fondo hasta conocer la verdad y, sólo después, debería verse si corresponde la aplicación de la ley de amnistía de 1978.
Sola Sierra, presidenta de la Asociación de Familiares de Detenidos-Desaparecidos, declaró que la solicitud militar era una situación grave enfrentada en los últimos años, y que pretendía poner punto final al tema de los desaparecidos sin investigar nada.