Grupos ajenos, presentes en la elección de rector: Juliana González
José Gil Olmos y Georgina Saldierna A partir de este lunes y hasta el próximo día 29, la Junta de Gobierno llevará a cabo el proceso de selección del nuevo rector de la Universidad Autónoma de México (UNAM) para los próximo cuatro años, y la doctora Juliana González Valenzuela, directora de la Facultad de Filosofía y Letras, advirtió sobre la posibilidad de que grupos políticos y económicos ajenos a la institución traten de influir durante esta etapa.
En vísperas de que, hoy, los 15 miembros de la llamada por los universitarios Junta de notables inicie la recepción de candidaturas en los cinco centros de registro, la doctora González se pronunció en favor de que el próximo rector retome los proyectos inconclusos en cuanto a aumentar las cuotas estudiantiles, modificar el estatuto general y académico, así como el pase reglamentado.
En entrevista, la directora de la Facultad de Filosofía y Letras aceptó la idea de proponer su candidatura para la rectoría, ya que, dijo, sería la primera vez que una mujer aspire a dirigir la máxima casa de estudios, y es importante que alguien del área de humanidades figure entre los candidatos.
Para la catedrática, no sería difícil que algunos grupos ajenos a la universidad estén interesados en entrar al proceso de selección del próximo rector que tienen a su cargo los 15 integrantes de la Junta de Gobierno. Incluso, recuerda que la institución ha sido considerada como un ``botín'' por su papel medular en la vida nacional.
``Seríamos ilusos y abstractos si no tomamos en cuenta que puede haber intereses políticos, grupos económicos que intenten incidir en el proceso de sucesión. En toda su vida la UNAM siempre ha existido esta amenaza, este acoso. Por eso, en este momento, debemos tener el ojo avizor para que el proceso sea lo más autónomo posible'', aseguró.
Atareada en responder entrevistas y en atender proyectos por concluir para la Facultad de Filosofía y Letras, Juliana González se muestra optimista en cuanto a que el proceso de elección se desarrolle en calma, y expresa su confianza en el trabajo de la Junta de Gobierno.
Respecto de esta última afirmó que representa ``la forma más feliz que han encontrado los universitarios para elegir al rector'', aunque no niega que exista la posibilidad del error.
Observó que la única complejidad que podría haber en este proceso de selección sería parte de la misma vastedad de la comunidad universitaria. Sin embargo, destacó tres puntos que tendrán que cuidarse en este lapso de definiciones: autonomía, respeto recíproco y conciencia de los valores y principios universitarios.
Desde su punto de vista, el ambiente universitario se encuentra tranquilo, y ello es parte de la principal característica de la rectoría de Sarukhán: ``paz y normalidad de trabajo''. Aunque, precisó, ``esto no significa que no haya habido conflictos y brotes de inconformidad o tendencias de grupos externos que siempre han estado en la UNAM y que quieren desestabilizar o mover el barco''.
Mujer con formación institucional, que sabe cuidar sus planteamientos antes de que la Junta de Gobierno la pudiera llamar como candidata a la rectoría, la doctora González insiste en destacar la estabilidad como principal aportación de la gestión del rector José Sarukhán, y asegura que su programa de academización dio resultados porque desplazó la ``malsana y excesiva politización'' que había en la vida universitaria antes de su llegada en 1989 y que había deteriorado la vida académica de la institución.
También habló del crecimiento desmesurado que llegó a tener la UNAM, calificándolo como un ``factor nefasto'' al que tenía que responder con valores académicos porque había creado, a su vez, una enorme burocracia.
Por ello, dijo, el próximo rector también deberá pensar en continuar el proyecto de academización, intensificarlo y darle la mayor representatividad posible, para que la academia ``pueda ser conducida por los académicos, que es la gran meta a la que la UNAM debe aspirar''.