$732 mil millones, presupuesto de 97

Juan Antonio Zúñiga y Antonio Castellanos Con un producto interno bruto (PIB) estimado para 1997 en 3 billones 50 mil millones de pesos (un crecimiento real de 4 por ciento respecto a 1996), el Presupuesto de Egresos de la Federación para el próximo año se aproximaría a 732 mil millones de pesos, de acuerdo con estimaciones preliminares del gobierno federal.

Para el sector social, las proyecciones gubernamentales contemplan una erogación conjunta que ascenderá a 395 mil 300 millones de pesos, equivalentes al 54 por ciento del gasto total. Se trata de impulsar los programas contra la pobreza extrema que afecta a casi 20 millones de habitantes, pero también fortalecer el gasto en salud, educación y los subsidios a leche y tortilla.

Funcionarios del gobierno federal afinan los últimos detalles del Presupuesto de Egresos, la Ley de Ingresos, así como los Criterios Generales de Política Económica para 1997 que se presentarán esta semana al Congreso de la Unión. Autoridades hacendarias adelantaron que el gasto público crecería 3.6 por ciento respecto al previsto para 1996. En las proyecciones se considera un tipo de cambio promedio de 8.70 pesos por dólar en el transcurso de 1997.

De acuerdo con las previsiones de funcionarios que detallan los escenarios económicos, se espera que la paridad de la moneda nacional frente al dólar cierre en 1996 en un rango que fluctúe entre los 8 y 8.10 pesos.

En materia petrolera se ha contemplado establecer un precio conservador de 14.50 dólares por barril en promedio, a pesar de que la cotización del crudo mexicano se encuentra en un rango de 20 dólares, y tanto el comportamiento de los mercados internacionales, en especial los conflictos en el Medio Oriente, permiten estimar un precio elevado por lo menos durante los próximos seis meses.

Pormenores de este panorama fueron planteados a diputados y senadores integrantes de las Comisiones de Hacienda en el Congreso de la Unión, con el fin de sensibilizar su posición frente al gasto público para el próximo año, en el que el gobierno federal piensa consolidar los avances económicos para reflejarlos en un menor deterioro del ingreso de los trabajadores.

En este sentido, las autoridades hacendarias han fijado como meta inflacionaria, de diciembre de 96 al mismo mes de 97, una tasa de 15 por ciento. El crecimiento promedio de los precios, en teoría sería menor al de los salarios mínimos, cuyo aumento para el próximo año fue fijado, en el seno de la Alianza para el Crecimiento, en 17 por ciento.

Para incentivar la actividad económica, proteger el empleo y generar nuevas fuentes de ocupación, el Presupuesto de Egresos de la Federación para 1997 contemplaría la canalización de 122 mil millones de pesos a obras de infraestructura, y renglones de efecto multiplicador en la generación de empleo, como en el caso de la construcción, hidrocarburos, electricidad y obras hidráulicas.

La Secretaría de Hacienda aplicaría la segunda fase del Programa de Apoyo a los Deudores del Fisco (Proafi), con el fin de permitir que las empresas --unas 200 mil-- estén en condiciones de obtener facilidades y condonaciones durante lo que resta de 1996 y en el próximo año, especialmente aquellas que tienen adeudos superiores a 5 mil pesos.

La inversión pública representaría 16.6 por ciento del gasto total y equivaldría al 4 por ciento del PIB estimado para 1997. Con este monto se calcula que se crearían no menos de un millón de empleos en zonas rurales, principalmente.

Las previsiones contemplan un déficit en el presupuesto de alrededor de 15 mil millones de pesos para 1997, cantidad equivalente al 0.5 por ciento del PIB, debido a que el monto de los ingresos estimados ascenderá a 716 mil 750 millones de pesos.

La estructura del gasto público prevé destinar 200 mil millones de pesos al pago de los intereses de la deuda externa e interna, así como a las participaciones de estados y municipios y los adeudos fiscales de ejercicios anteriores.

Dentro del gasto se considera utilizar 30 mil millones de pesos (3 mil 500 millones de dólares) para el pago de refinanciamiento de la deuda externa, lo que contribuiría al déficit presupuestal de referencia.

En los criterios de política económica para 1997 se contempla un saldo favorable cercano a los mil 750 millones de dólares en la balanza comercial, mientras en la cuenta corriente de la balanza de pagos, que registra los grandes ingresos y salidas de divisas, se estima un déficit cercano a 7 mil millones de dólares.