Diez pesos diarios, la ayuda a familias pobres
Oscar Camacho Guzmán Diez pesos diarios por familia es la cantidad que el gobierno federal tiene proyectado destinar durante 1997 como subsidio para que 400 mil familias que viven en la miseria, en 11 regiones del país, satisfagan sus necesidades de alimentación, salud y educación.
Dieron a conocer lo anterior ayer el vocero de la Secretaría de Hacienda, Alejandro Valenzuela, y diputados del sector popular del Partido Revolucionario Institucional, durante una reunión con reporteros en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en la que reconocieron que los recursos presupuestales destinados a gasto social y público en 1997 serán menores en términos reales que los ejercidos este año y no alcanzarán para atender todas las necesidades sociales.
--¿Cuándo considerará el presupuesto que envíe el Ejecutivo a la Cámara de Diputados la necesidad de pagar la deuda social que se tiene con los mexicanos? --se le preguntó al funcionario de Hacienda y a los legisladores priístas Rosario Guerra, Jaime del Río, Francisco Suárez Dávila y Antonio Godina.
Alejandro Valenzuela guardó silencio y la diputada Rosario Guerra tuvo que responder:
--Básicamente el concepto de deuda social no existe en ninguna materia presupuestal del mundo... En el asunto de la deuda social a nosotros no nos quedaría claro cómo se regiría esto.
Sin embargo, dijo que para los priístas la forma de atender las necesidades de la gente es a través del gasto social y de la inversión pública, pero cuando se le recordó que en términos reales el gasto social ha sido menor en los últimos años, al no incrementarse al ritmo del crecimiento de la población, y con ello han disminuido los recursos por habitante, aceptó que el gasto social ``no alcanza para paliar'' la marginación social.
En la reunión, los diputados del Partido Revolucionario Institucional y el funcionario de Hacienda reiteraron datos y cifras sobre las previsiones económicas del gobierno para 1997.
Indicaron que el endeudamiento externo que se autorizará al Ejecutivo será hasta de cinco mil millones de dólares; que se tiene previsto crecer tres o cuatro por ciento, con posibilidades de llegar a cinco por ciento; que este jueves se anunciará un tipo de cambio promedio para el próximo año, que la inflación será de 15 por ciento y que en el actual no se podrá cumplir la meta de 20 por ciento, pues la inflación será de 26 por ciento, y que las medidas para combatir la evasión fiscal no están dirigidas a los contribuyentes comunes, sino contra los grandes empresarios y corporativos.
Casi al final de la reunión con los reporteros fue cuando surgió el tema de la pobreza y Alejandro Valenzuela anunció que para 1997 el gobierno federal tiene proyectado aplicar el Programa de Alimentación, Salud y Educación (PASE) para 400 mil familias en 11 regiones del país.
Por su parte, el diputado Antonio Godina explicó que el monto anual para este programa será de mil 500 millones de pesos, es decir, 10 pesos diarios para que cada una de las 400 mil familias consideradas puedan satisfacer sus necesidades de alimentación, salud y educación.
Explicaron además que con este programa se sustituirá la entrega de subsidios en especie como la leche y la tortilla a través de Conasupo y en lugar de ello se tiene previsto entregar una cantidad fija mensual de dinero en efectivo a cada una de las 400 mil familias para que ellas decidan lo que compran, y con ello establecer un subsidio.
Se les hizo ver que a finales de septiembre la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam) emitió un dictamen en el que concluía que el programa piloto del Programa de Alimentación, Salud y Educación, aplicado en Campeche, había sido un fracaso y que por lo tanto recomendaba que no fuera la base de la política del gobierno para combatir la pobreza.
Tanto el funcionario de Hacienda como los priístas dijeron desconocer dicho dictamen y anunciaron que el PASE se aplicará a partir del 1o. de enero de 1997.
Finalmente, se confirmó que este jueves acudirá a la Cámara de Diputados el secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz Martínez, para entregar los Criterios Generales de Política Económica para 1997.