Letra S, 7 de noviembre de 1996
La consigna ``medicamentos para todos'' es el origen del Frente
Nacional de Personas Afectadas por el VIH/sida (FrenpaVIH). Este nuevo
Frente fue dado a conocer en conferencia de prensa el pasado 23 de
octubre. Allí, seis de sus miembros, entre ellos dos mujeres, con los
rostros cubiertos con pasamontañas --``por la discriminación que
persiste en la sociedad hacia las personas infectadas''--, junto con
el doctor Juan Sierra, del Instituto Nacional de Nutrición, y la
periodista María Victoria Llamas, informaron que, debido a su elevado
precio, en México sólo dos por ciento de las personas afectadas por el
virus que causa el sida tiene acceso a los nuevos medicamentos para
combatir la enfermedad.
Los nuevos fármacos, llamados ``inhibidores de proteasa'', en combinación con los medicamentos anteriormente utilizados (AZT, ddI, ddC y 3TC) tienen la capacidad de reducir la carga viral en el organismo hasta en un noventa por ciento. Eso significa, dijeron, ``que estamos a las puertas de una nueva era en el tratamiento y control del sida''. Sin embargo, los altos costos de los novedosos antivirales les están cerrando esas puertas a la mayoría de las personas que los necesitan. El costo total anual de la nueva terapia combinada, incluyendo gastos de consulta médica y estudios de laboratorio, lo calculan en 73,200 pesos por paciente, cifra sin duda elevada, pero que en comparación con los costos de los servicios de hospitalización (dos al año), calculados en 124,800 pesos, representa una ventaja.
En ese sentido, el doctor Juan Sierra argumentó que para el Sistema Nacional de Salud ``es inmensamente más cara la hospitalización de una persona afectada por el sida, que el tratamiento ambulatorio basado en una combinación de medicamentos''.
El especialista destacó que en otros países, al sida se le trata como un padecimiento ``crónico-controlable''. Sin embargo, añadió, en México las políticas del sector salud siguen ubicando al sida como una enfermedad mortal e incurable ``a la cual no vale la pena invertirle más recursos''.
Organizarse por la vida
El FrenpaVIH, cuenta con un comité organizador de 17 miembros, y una asamblea con alrededor de 800 personas.
Los objetivos fundamentales de esa organización son: incorporar al cuadro de medicamentos básicos a los nuevos inhibidores de proteasa; disminuir el costo de estos medicamentos; presionar a los laboratorios para que abran protocolos que incorporen a mayor número de personas que los requieren.
El 23 de septiembre pasado, el FrenpaVIH envió una carta al presidente Ernesto Zedillo, en la cual exponen la necesidad de incorporar los nuevos medicamentos al cuadro básico y solicitan que se ponga en marcha medidas que aseguren el acceso a los tratamientos.
No queremos privilegios
``No estamos pidiendo más ni menos. Reclamamos que se destinen bien los recursos y que se modifiquen las perspectivas de la enfermedad'', subrayó Arturo Vázquez, durante la conferencia de prensa citada.
De esta forma, los asistentes, José Luis Castro, enfermo hemofílico, David Urbina y Gerardo Martínez, junto con las mujeres encapuchadas, cuestionaron posiciones como las expresadas por el ex dirigente panista Carlos Castillo Peraza, las propias autoridades hospitalarias y de salud, quienes consideran que los pacientes con sida reclaman tratos privilegiados.
Sólo piden que se evalúen las ventajas de su propuesta, tomando en cuenta los estudios realizados en el país. En un boletín de prensa el FrenpaVIH informa que durante 1995, Conasida, junto con algunos laboratorios, llevó a cabo un protocolo de investigación con 50 pacientes, a quienes se aplicó la nueva terapia combinada con AZT, ddI, y Crixiván. Los resultados están a la vista, de tres a seis meses la recuperación de los pacientes fue notable. ``En consecuencia, agregan, la persona recupera su capacidad productiva y puede vivir normalmente con un padecimiento crónico pero no mortal.''
Los miembros del Frente informaron que más adelante darán a conocer las acciones que llevarán a cabo para conseguir sus objetivos.