Dos campesinos asesinados por gente de uniforme militar en Guerrero

Maribel Gutiérrez, corresponsal, Acapulco, Gro., 9 de noviembre Dos campesinos fueron asesinados por grupos de hombres armados con fusiles AK-47 y vestidos con uniformes verde olivo como militares, en dos comunidades de la sierra de Atoyac.

Con estos hechos, suman 20 los homicidios en esta región de la sierra cometidos en condiciones similares durante los últimos seis meses, sin que las autoridades municipales y los habitantes encuentren una explicación de los motivos de la ola de violencia, pues afirman que las víctimas son personas pacíficas, sin conflictos personales, políticos o de otro tipo.

El jueves 7, a las siete de la noche, en la comunidad de Agua Fría, fue asesinado el campesino Marcial Orbe Zarco, de 58 años. Los familiares informaron que seis hombres uniformados como militares llegaron a la casa del campesino, que tiene una pequeña tienda, donde pidieron unos refrescos. Dos de los uniformados, que según testigos llevaban escudos e insignias del Ejército Mexicano, se metieron en la casa y dijeron: ``somos del Ejército, ¿dónde está Marcial? No le vamos a hacer nada''.

Encontraron al campesino dentro de la casa, lo sacaron con violencia, y en la puerta de la vivienda le dispararon más de 30 balazos de cuerno de chivo.

En la comunidad de El Escorpión, a poca distancia de Agua Fría, este viernes por la tarde fue asesinado el campesino Ramiro Mesino Galicia, también por un grupo de hombres armados con AK-47 que lo interceptaron en el camino a su parcela.

Desde mayo de este año han sido constantes los asesinatos cometidos por grupos de hombres con armas de alto poder y vestidos de militares.

Entre los crímenes más recientes en la misma región se recuerda el homicidio del dirigente seccional del PRI en Agua Fría, José Rosas Nario, que el 26 de septiembre recibió cinco heridas de bala cuando regresaba a su domicilio después de haber asistido a una reunión de su partido.

El 5 de octubre, un día antes de las elecciones, fue asesinado el campesino Antonio Arreola Moreno, presidente del seccional del PRI en la comunidad de El Achotal.

El sábado 12 de octubre fueron asesinados dos campesinos de Agua Fría.

Las víctimas, Pedro Nario Mesino, de 45 años, y Margarito Corona Martínez, de 39, viajaban en una camioneta de pasajeros hacia la cabecera municipal de Atoyac que fue interceptada por hombres armados que los obligaron a bajar y los internaron en el monte, donde los acribillaron.

El 11 de septiembre, en Agua Fría, fue asesinado el campesino Natalio Gervacio Bello, de 24 años, militante del PRD.

En los últimos meses la violencia ha afectado de manera particular a los habitantes de Agua Fría.

A finales de agosto once familias abandonaron sus casas, sus siembras y todas sus pertenencias en este pequeño poblado de la sierra, porque sus integrantes fueron amenazados de muerte.

Las amenazas se presentaron nuevamente el 2 de octubre, contra 60 ciudadanos, que por ese motivo emigraron de su comunidad.

La emigración continúa por temor a la violencia y se estima que más de la mitad de los habitantes han salido del pueblo