La Jornada 10 de noviembre de 1996

Pretende el DDF elevar hasta en 85% tarifas de transporte en 97

Alberto Nájar El próximo año el Departamento del Distrito Federal aplicará un incremento de entre 60 y 85 por ciento a las tarifas del transporte urbano, a fin de compensar el impacto inflacionario y abatir el rezago que se tiene en esa materia, informó la coordinadora del PRD en la Asamblea de Representantes, Dolores Padierna Luna.

La propuesta del gobierno capitalino se incluirá en el proyecto de ley de ingresos que se someterá a consideración de la Asamblea a finales de este mes. En reuniones con legisladores, el director del Metro, Alfonso Caso, y el secretario de Transportes y Vialidad, Jorge Ramírez de Aguilar, adelantaron que las autoridades pretenden aplicar aumentos que rebasen el crecimiento real esperado en el Indice Nacional de Precios al Consumidor.

El piso de la propuesta se ubica en 60 por ciento, y de allí puede aumentar hasta alcanzar el 85 por ciento, explicó Padierna Luna. Además, indicó, desde finales de octubre se suspendieron las reuniones entre los asambleístas para tratar el tema, lo cual en los hechos significa que la mayoría priísta ya tomó la decisión de aprobar, ``como sea'', el paquete fiscal que incluye el incremento al transporte público.

``Estamos haciendo nuestras previsiones, porque seguramente nos van a argumentar que los aumentos a las tarifas son una facultad exclusiva del gobierno, pero si se incluyen en la ley de ingresos nosotros (los asambleístas) podemos discutirlas'', dijo. ``Aunque no quieran, la Asamblea autoriza el techo financiero de las empresas que manejan el transporte''. Dos son los argumentos de las autoridades: compensar el impacto que tendrá la inflación en los costos de operación del sistema de transporte, y abatir el rezago que tienen las tarifas desde hace varios años.

El PRI saluda con sombrero ajeno

Por otra parte, Dolores Padierna informó que este lunes, a las 9 de la mañana, la Comisión de Gobierno recibirá oficialmente el análisis final de la cuenta pública del DDF correspondiente a 1995, que deberá incluir explicaciones a las irregularidades detectadas y recomendaciones para solucionarlas.

En ese sentido, dijo, el documento debe tener cuatro puntos básicos: el resultado de las auditorías a las 81 dependencias más importantes del gobierno capitalino, reporte de las 15 mil cuentas que se revisan, las recomendaciones que hace la Comtaduría Mayor de Hacienda de la Asamblea respecto a las irregularidades encontradas, y la autorización o no a la petición que formuló el PRD para auditar a las delegaciones y otras 21 dependencias. ``En cada uno de los puntos vamos a hacer argumentaciones, porque deben aclararse los rubros que aparecieron sin datos suficientes para establecer la empatía con el presupuesto de egresos'', destacó. ``Donde esto no sea posible debe haber una explicación detallada de la forma como se gastaron los recursos''.

Uno de los aspectos donde los asambleístas del PRD pondrán especial cuidado es la partida presupuestal destinada al jefe de gobierno, pues ésta podría ser la fuente de los elevados aguinaldos que recibieron Oscar Espinosa y sus colaboradores el año pasado. ``Tiene que venir una explicación contundente''.

De acuerdo con Dolores Padierna, los legisladores tienen una oportunidad histórica para revisar las cuentas del Distrito Federal, pues anteriormente este análisis se perdía entre todos los documentos del gobierno federal que verificaba la Cámara de Diputados. ``Para ellos el DF es un asunto menor''.

La coordinadora de la fracción perredista reconoció, sin embargo, que son pocas las posibilidades de que los documentos que se entreguen el lunes cumplan con los puntos planteados anteriormente.

No obstante, con el análisis que se realice ``estaremos en condiciones desde el jueves para solicitar --con todos los requisitos legales-- que el pleno de la Asamblea apruebe las auditorías solicitadas por el Partido de la Revolución Democrática.

Por lo pronto, Padierna Luna criticó la postura que asumieron los legisladores priístas, a quienes súbitamente les surgieron deseos de defender a las clases más necesitadas.

Dijo que pretenden ``colgarse medallas que no merecen'', pues por ejemplo los subsidios y descuentosa jubilados ya están autorizados en el Código Financiero, y surgieron por un propuesta del Partido de la Revolución Democrática y el Partido Acción Nacional.

Por si fuera poco, los priístas autorizaron ajustes superiores al 20 por ciento en todas las contribuciones, y se preparan para aprobar un incremento de entre 60 y 85 por ciento a la tarifas del transporte urbano. ``Pero de eso no dicen nada, ni una palabra'', finalizó.