BOMBARDEO EN ZAIRE
Ansa. Afp, Efe y Reuter, Kinshasa, 9 de noviembre Los combates en el este de Zaire entre las fuerzas de ese país africano y los rebeldes continuaron hoy, en tanto que el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sentó las bases para la formación de una fuerza militar internacional que se encargaría de facilitar la entrega de ayuda humanitaria a más de un millón de refugiados establecidos en la zona --miles de los cuales han muerto de sed o hambre--, aunque aún no determina la fecha del envío de tropas a Zaire.
A pesar de que desde hace 10 días controlan la mayor parte del oriente de Zaire, los rebeldes tutsis zaireños, apoyados por soldados ruandeses, continuaron enfrentando a soldados del ejército en Uviria, Bukavu y Goma, las tres principales ciudades de la región, donde hasta el mes pasado se concentraban cientos de miles de refugiados, provenientes de Ruanda en su mayoría.
Por lo menos una persona murió el viernes en la noche durante un bombardeo con mortero contra el centro de Goma, que pese a haber sido tomada la semana pasada por los insurgentes zaireños (casi todos del grupo tutsi banyamulenge) sigue siendo objeto de ataques de ex soldados hutus ruandeses que también figuran entre los refugiados.
Un portavoz de los rebeldes denunció que en el campamento de refugiados de Mugunga, donde viven hacinadas decenas de miles de personas, se encuentran combatientes hutus ruandeses, quienes cuentan incluso con artillería y que mantienen sus ataques contra las milicias banyamulenges.
En Kinshasa, el representante especial de la ONU en la región de los Grandes Lagos, el canadiense Raymond Chrtien, reconoció el fracaso de sus gestiones ante los líderes zaireños y ruandeses para hacer llegar la ayuda humanitaria requerida con urgencia por los refugiados establecidos en Zaire, para lo cual se requeriría del envío urgente de una fuerza militar internacional.
El gobierno zaireño aceptó en principio la propuesta, promovida principalmente por Francia, para que una fuerza compuesta de por lo menos 5 mil hombres sea desplegada en Zaire a fin de garantizar la entrega de ayuda humanitaria a los refugiados errantes en la zona en conflicto --a los que se añaden miles de zaireños desplazados por los enfrentamientos-- y entre los cuales han muerto de inanición miles de niños y ancianos.
Por su parte, Ruanda, que niega apoyar a los rebeldes zaireños, objeta la participación de Francia en la operación humanitaria, por considerar que el gobierno de París respalda incondicionalmente a Kinshasa, pero acepta en principio el envío a la región de una fuerza militar internacional ``neutral''.