CATEOS EN 200 VIVIENDAS
Miriam Posada García La Secretaría de Seguridad Pública y la Policía Judicial realizaron ayer un operativo en la colonia Atlampa, para capturar a un grupo de asaltantes de transeúntes, microbuses y negocios, que operan en la zona y se resguardaban en vecindades de las calles Nopal, Pino y Oyamel.
Alrededor de las 9:30 horas de ayer, 400 elementos del agrupamiento Fuerza de Tarea Zorros, Motopatrulleros, del agrupamiento Femenil, Granaderos, de Helicópteros, de la Secteraría de Seguridad Pública, y cerca de 200 elementos de la Dirección de Robo a Bancos y delincuencia Organizada irrumpieron en la colonia Atlampa.
Motopatrulleros del agrupamiento Jaguares y personal femenino del agrupamiento Cisne se encargaron de cercar cuatro calles a la redonda a fin de impedir la entrada y salida de vehículos.
Mientras, encampuchados armados y acompañados por perros de ataque rodearon las vecindades de la calle Nopal y Oyamel, y se apostaron en las azoteas y aguardaron la orden para entrar a las viviendas.
Al recibir la orden los elementos entraron a las vecindades marcadas con los números 108, 114, 115, 155, 145 y 163 de Nopal, en donde buscaron algún tipo de arma, droga o evidencia para culpar a los presuntos delincuentes.
Los policías encontraron diversas armas punzocortantes, como navajas, cuchillos, puñales, varillas, picahielos y puntas, además de bolsas con objetos presuntamente robados como relojes, anillos, carteras e incluso dos credenciales de elementos de la Policía Judicial.
Los propios policías explicaron que el operativo se realizó a petición de los vecinos, ya que esta zona de la colonia Atlampa durante años se había reconocido como de alta peligrosidad por la presencia de delincuentes.
Con el operativo se capturaron 42 presuntos responsables de robo a transeúntes, a usuarios de microbuses y a negocios aledaños, por lo que serán consig- nados ante la séptima agencia del Ministerio Público.
En este sentido, el Ministerio Público de la Dirección de Robo, Eduardo Martínez, explicó que los policías actuaron ``conforme a derecho'', porque para poder realizar el operativo la Policía Judicial y la SSP obtuvieron una orden para catear 200 viviendas, emitida por el juzgado primero de lo penal.
Por parte de la Secretaría de Seguridad Pública estuvo al frente del operativo el director de Agrupamientos, Enrique Tello Quiñones, y por la Policía Judicial, el titular de la Dirección de Robo a Bancos y Delincuencia Organizada, Alfredo Herrera Torres.
Las opiniones de los vecinos fueron encontradas: algunos aplaudieron la participación policiaca ``porque hasta a nosotros nos pasan a cuchillo los rateros'' , y explicaron que el problema del robo a transeúntes y el rapto de camiones ``no tiene poco; hace 40 años que eso pasa en Atlampa y ser ratero es casi un oficio de familia''.
Destacaron que el modo de operar de los maleantes es ``muy conocido, secuestran los microbuses y los meten en la calle de Pino, ahí le quitan todo lo que pueden a la gente y hasta han violado a mujeres, y matado a gente, y luego se vienen a esconder a las vecindades''.
Pero la parte contraria dijo que los policías cometieron ``muchos abusos, destrozaron cosas cuando entraron a las casas y se llevaron a muchachos que no son malas personas''.
Algunos niños que se encontraban solos en sus casas se asustaron por la presencia policiaca, algunos vecinos fueron sorprendidos en el cuarto de baño y otros dijeron haber perdido sus pertenencias durante el cateo.
Tampoco faltaron los que omitieron hacer comentarios respecto a los delincuentes que operan en la zona, porque ``luego quién me defiende a mí''. Tan rápido como llegaron los cuerpos policiacos al lugar así se dispersaron y en la calle de Nopal sólo quedaron los vecinos quienes manifestaron todo tipo de experiencias que dicen haber padecido en éste y en otros operativos.