La Jornada 13 de noviembre de 1996

LUTO EN NUEVA DELHI

Reuter, Afp, Dpa, Efe y Ansa, Nueva Delhi, miércoles 13 de noviembre Los 351 ocupantes de dos aviones de pasajeros que chocaron hoy en pleno vuelo cerca de Nueva Delhi habrían muerto, en lo que representa la mayor catástrofe aérea de todos los tiempos, afirmó el director de la aviación civil de India, H.S. Jola.

Los dos aparatos, un Boeing 747 de Arabia Saudita y un Iliushin-76 de carga de Kazajastán --en principio se había dicho que era un Tupolev-154-- chocaron cuando caía la noche a unos 70 kilómetros al oeste de Nueva Delhi, en el estado de Haryana, a unos 4 mil 500 metros de altitud.

En las primeras horas de este miércoles habían sido recuperados 275 cadáveres, entre ellos el del piloto y el de una azafata de la línea saudiárabe, indicó la agencia india PTI. Se teme que no se halle ningún sobreviviente tras remover los escombros, dispersos, al igual que los cuerpos de los pasajeros calcinados, en un radio de seis kilómetros en las cercanías de la aldea de Charkhi Dadri, expresó un funcionario de operaciones del aeropuerto de esta capital.

Un piloto de la fuerza aérea de Estados Unidos que volaba por las cercanías dijo haber visto caer dos bolas de fuego tras producirse el impacto de las aeronaves, una en ascenso y otra prepárandose para aterrizar. De confirmarse el total de víctimas, el desastre sería uno de los cinco mayores de la historia en términos de pérdida de vidas y el peor debido a la causa: el choque de dos naves en vuelo.

El Boeing 747 de la Arabian Airlines Corporation llevaba 312 personas a bordo, entre ellos 23 tripulantes, y había despegado de esta capital rumbo a la ciudad saudiárabe de Dahran y Jeddah, mientras que en el Iliushin de la Kazaj Airways viajaban 29 pasajeros y 10 tripulantes, y salió de la ciudad kazaja de Chimkent para aterrizar en esta ciudad.

La mayoría de los muertos del Boeing eran ciudadanos indios que iban a trabajar a Arabia Saudita --aunque también había nueve nepaleses, dos estadunidenses, tres paquistaníes, un británico, un bengalí y un saudí a bordo-- mientras que los de la otra nave eran cuidadanos kazajos en viaje a Nueva Delhi.

El primer ministro de India, H.D. Deve Gowda, ordenó una investigación para determinar las causas de la colisión, dijeron funcionarios de la Dirección de Aviación Civil, y añadieron que el avión saudiárabe había recibido autorización de la torre de control de Nueva Delhi para ascender a una altitud de unos 4 mil 270 metros, y el vuelo kazajo recibió permiso para descender a 4 mil 570 metros en la misma ruta.

Unni Kartha, ex piloto de aviones caza, dijo que el accidente pudo deberse a un problema de comunicación entre la torre de control y los pilotos. Otros expertos consideraron que quizá hubo un mal funcionamiento de los altímetros de alguno de los dos aviones.

M.W.N. Deshmukh, director de las comisiones de seguridad de la aviación, organismo oficial, denunció las condiciones de seguridad en India y las calificó como una de las peores del mundo. La Asociación de Trabajadores de Control de Tráfico Aéreo del aeropuerto de la capital indicó por su parte que la colisión se habría evitado si existieran rutas distintas de partida y arribo para los aviones.

Otro aparato, un helicóptero turco, también se estrelló el martes en la isla griega de Rodas, y al parecer sus cuatro tripulantes murieron.