Asegura Profeco que el alza en productos básicos es ``artificial''
La oleada de alzas en precios de productos básicos desatada en las pasadas dos semanas es ``completamente artificial'' y se frenará de inmediato con un fuerte operativo de clausuras, multas y hasta arrestos administrativos contra comerciantes que incrementen excesivamente los precios.
El procurador Federal del Consumidor, Fernando Lerdo de Tejada, señaló lo anterior y apuntó que se va a ``actuar en serio'' y con una acción concertada contra los especuladores.
Anunció que en los próximos días comenzará una campaña de clausuras en los comercios donde se detecten incrementos de precios, y dijo que estas acciones forman parte de un operativo que se aplicará en toda la República.
La Profeco también impondrá sanciones económicas y fijará engomados amarillos en algunos establecimientos, para advertir a los consumidores que en ese lugar ``se cometen prácticas abusivas que contravienen lo dispuesto en la Ley Federal de Protección al Consumidor''.
En los casos de reincidencia de comerciantes y prestadores de servicios en prácticas como el incremento injustificado de precios o el condicionamiento de ventas, se aplicarán arrestos administrativos, precisó.
Entrevistado en sus oficinas, Lerdo de Tejada explicó que no hay razón económica ni motivos técnicos para que existan incrementos de precios por arriba de las revisiones normales, ya que ni siquiera se han aplicado los aumentos en los energéticos.
En su opinión fueron ``factores psicológicos'' y las expectativas de inflación los que influyeron en las recientes alzas, pues algunos rumores sobre incrementos en ciertos productos se concretaron en la elevación de precios cuando no había razones técnicas para ello.
A partir del primer día del mes entrante la vigilancia de la Profeco también estará encaminada al programa de diciembre, que incluirá acciones especiales para proteger el aguinaldo.
Desaparecieron las concertaciones
Lerdo de Tejada explicó que prácticamente desaparecieron las concertaciones de precios entre productores y funcionarios de Comercio. Ahora, el mercado nacional está liberalizado, e incluso reconoció una cierta distorsión de precios, ya que iguales productos tienen un costo al público muy diferente según el establecimiento.
Indicó que la política de comercio interior que está siguiendo el gobierno tiene el propósito de privilegiar el abasto; o sea que se prefiere que se encuentren los productos a pesar de que el precio esté liberado.
Apuntó Lerdo de Tejada que los precios controlados sólo limitan la producción y estancan la inversión, lo cual resulta contraproducente para los consumidores porque se provoca escasez de bienes, y agregó que ya se ha demostrado que es inútil pretender regular el mercado con normas y reglas. Por ello, ante una crisis como la que vive el país ``se ha decidido privilegiar el abasto'' por sobre los precios, concluyó.
Al preguntarle sobre si las recientes alzas de precios han ``pulverizado'' el incremento a los mínimos concertado en la Alianza para el Crecimiento, sostuvo que la inflación no sólo golpea a un sector si no a todos, incluido al propio gobierno y hace que tenga que ajustar presupuestos. Por ello, lo que más conviene es parar en seco esta espiral de aumentos de precios, concluyó.