La Jornada 19 de noviembre de 1996

Se descartan Gonzalo Celorio y Sergio Reyes Luján de la contienda

José Gil Olmos y Georgina Saldierna El coordinador de extensión cultural de la UNAM, Gonzalo Celorio, descartó ayer cualquier pretensión de asumir la Rectoría de la máxima casa de estudios. No obstante, rechazó la idea de cambiar el proceso de selección por medio de la Junta de Gobierno porque, opinó, debe estar alejado de las ``leyes del clientelismo político''.

En entrevista, el escritor consideró su mención para sustituir al rector José Sarukhán como ``un reconocimiento'' a la importancia de la difusión cultural de la UNAM, porque por primera vez un encargado de esta área es considerado aspirante a la Rectoría.

``No estoy en campaña ni voy a promoverme'', atajó Celorio al explicar su intención de terminar varios proyectos culturales antes de que concluya la actual admistración universitaria.

Con ocho años al frente de la difusión cultural de la UNAM, los mismos de Sarukhán en la Rectoría, destacó como puntos en favor de esta administración su proceso de academización y el fortalecimien- to de la vida colegiada por medio de los consejos académicos de área creados por el actual rector.

Según Celorio, otro punto destacable de la rectoría de Sarukhán es la estabilidad y la ``paz'' que se alcanzó en estos ocho años, dejando atrás los conflictos de que fue presa al ser utilizada por fines ajenos a la propia universidad.

En el plano de la extensión cultural dijo que simultáneamente se logró la importancia de dos actividades ``sustantivas'' de la UNAM: la investigación y la academia.

A una pregunta sobre los puntos en los que aún se tendrá que trabajar, citó la federalización y la descentralización administrativa, no superados todavía.

Tendrá que fortalecerse el nivel de bachillerato, sostuvo, y rechazó las afirmaciones de que este nivel escolar sea un ``lastre'' para la UNAM. Al contrario, explicó, es una ventaja para la institución preparar a sus propios estudiantes que ingresarán a los niveles superiores de educación.

Reconoció además la necesidad de trabajar en la vinculación de las ciencias y las humanidades pues, aventuró, las primeras forman parte del quehacer humanístico porque son hechas ``por y para el beneficio del hombre''.

Celorio reafirmó la idea de que la labor de la Junta de Gobierno ha dado estabilidad a la UNAM en más de 50 años y ha impedido que la institución se traslade a los extremos: el de la elección ``democrática'' a través del voto sujeto al ``clientelismo político'', o aquel en el cual el rector es elegido por un patronato sin la menor participación de la comunidad universitaria.

El desarrollo del actual proceso de sucesión de Rectoría lo calificó de ``espléndido'' por el numeroso grupo mencionado ante la Junta por la comunidad universitaria. Eso ``habla de la riqueza de la UNAM y de que hay muchas opciones para escoger a la persona más adecuada''.

Resaltó además la tranquilidad con que se desarrolla el proceso, ``sin exaltaciones'', lo cual adelanta ``un buen descenlace''.

Por su parte, el físico Sergio Reyes Luján no obstante haber sido mencionado entre los 27 universitarios que podrían ocupar la Rectoría de la UNAM, informó ayer que no participará en la sucesión de la máxima casa de estudios del país.

Destacó que su inclusión en la lista de universitarios que recientemente dio a conocer la Junta de Gobierno obedece a una especial deferencia de un grupo de universitarios, lo cual no implica que esté en campaña, y explicó que su interés se centra en cumplir las tareas del Programa Universitario de Estudios Sobre la Ciudad de México.

Otros nombrados y que aún no dan a conocer si participarán o no en el proceso son Gerardo Suárez, coordinador de la Investigación Científica; Alejandro Cravioto Quintana, director de la Facultad de Medicina; Ricardo Pozas Horcasitas, director del Instituto de Investigaciones Sociales; Víctor Palencia Gómez, director de la ENEP-Acatlán, y David Pantoja Morán, secretario general del Colegio de México