Rosa Elvira Vargas En la consolidación de la democracia plural que hoy construyen los mexicanos ``no hay lugar para la duda ni para el retroceso'', aseguró el presidente Ernesto Zedillo, y reiteró que seguirá usando todos los recursos legítimos del gobierno para devolver a los ciudadanos, las familias y las empresas, la seguridad a que tienen derecho y la confianza en las instituciones encargadas de aplicar la ley.
Además, comprometió su gestión a fortalecer las instituciones de procuración de justicia y a continuar la transformación del sistema legal y judicial para garantizar, en la práctica de todos los días, ``una aplicación equitativa, sin privilegios, de las leyes''.
En otro orden, Zedillo informó que al término de la primera quincena de noviembre, el número de trabajadores permanentes afiliados en el Seguro Social llegó a 9 millones 101 mil, cifra superior en casi 600 mil al número registrado al cierre de 1995. Esta, mencionó, es la primera vez que se rebasan los 9 millones permanentes registrados en el IMSS en la historia del instituto.
Ayer por la mañana, el Presidente se reunió con empresarios exportadores, quienes le demandaron concretar en el país un estado de derecho y un régimen verdaderamente democrático, con instituciones sólidas, y enfatizaron la necesidad de impulsar ``un agresivo programa de sustitución de importaciones''.
Por su parte, Zedillo se refirió de nuevo a que durante el tercer trimestre del año, el producto interno bruto (PIB) se elevó 7.4 por ciento en términos reales respecto al mismo periodo en 1994. Así, indicó, en conjunto durante los primeros nueve meses del año se registró ya un crecimiento del PIB del 4.4 por ciento en comparación con los niveles del año pasado.
Comentó que al término de octubre la tasa de desempleo abierto en México descendió a 5.2 por ciento, ``la más baja desde enero de 1995''. Y sobre la actividad exportadora mencionó que al término de este año se estima que las ventas totales habrán crecido alrededor de 34 mil 500 millones de dólares desde enero de 1995, lo que representa un incremento de prácticamente 57 por ciento respecto a diciembre de 1994.
Mantener la libre flotación
Por los exportadores, Gilberto Marín Quintero planteó que deben redefinirse los objetivos del Banco Nacional de Comercio Exterior, mantener el régimen de libre flotación de la moneda, impulsar una política de sustitución de importaciones y alentar el ahorro interno.
Dijo además que deben retomarse las políticas de sustitución de importaciones, abandonadas hace 14 años cuando se inició en el país la aplicación del modelo de apertura económica y comercial, y dijeron que aquellas deben impulsarse, ``en especial para reducir la dependencia en bienes intermedios'', y alentar la atracción de inversión nacional y extranjera porque ``es ahí donde el costo-país y la falta de incentivos competitivos juegan un papel importante''.
Durante un desayuno al término del cual el presidente Zedillo entregó el Premio Nacional de Exportación, Marín Quintero abundó en planteamientos y peticiones: alentar el ahorro interno, la creación de empleos y la atracción de inversión directa; fomentar la reinversión de utilidades, exenciones fiscales temporales, depreciación acelerada y mantenimiento de los principios de igualdad y proporcionalidad en materia impositiva; devolución expedita del IVA y evitar la prolongación excesiva de auditorías.
Asimismo, el representante de los exportadores pidió estar pendientes ante la entrada de capitales especulativos que pudieran influir en el tipo de cambio y cuidar ``muy de cerca'' el complejo balance entre reservas internacionales, flujos de capital del exterior, déficit en cuenta corriente y evolución de la paridad peso-dólar.
En el renglón del transporte, puso énfasis en el alto índice del robo de vehículos en las carreteras, y sobre las prácticas desleales del comercio internacional, planteó crear una comisión federal de comercio exterior para determinar la existencia de daño a la industria mexicana por la importación bajo condiciones de dumping o subvenciones.