La transición del país afectará a los viejos controladores del poder: Abascal

El sector patronal pidió al presidente Ernesto Zedillo asumir un liderazgo tal que se convierta en el motor del cambio estructural y de la consolidación del desarrollo económico de México, pero sin convertirse en ``el Tlatoani ni en el gran caudillo''.

Esta postura del Presidente, juzgó Carlos Abascal Carranza, será clave en la reforma del Estado y del Poder Ejecutivo.

No obstante, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana advirtió que la transición tendrá costos, particularmente para ``algunos perdedores que, confío, sean los viejos controladores del poder''.

Previno a los gobernantes de no cometer el error histórico de crear y sostener ``ídolos con pies de barro, que desde la Conquista y el Virreinato han dañado a la nación''.

``Hablo de Porfirio Díaz, de la Revolución, y hablo, indudablemente, de los presidentes y funcionarios públicos recientes'', dijo el líder empresarial tras solicitarle un examen del estilo de gobernar de Ernesto Zedillo. Al final de la reunión quincenal de la Comisión de Seguimiento y Evaluación de la ACE, Abascal llamó a desmitificar a personajes históricos para ubicarlos ``en el papel que les corresponde, sin partidismos ni pasiones''.

Exhortó a analizar los movimientos armados en el país ``sin exagerar, porque le damos a la nación y al mundo la impresión de que estamos en una violencia tal que lo único que producimos es ahuyentar las inversiones''.

Convencido de que el objetivo central debe ser crear condiciones de seguridad física y jurídica para atraer inversiones, generar empleos y riqueza, Abascal se opone a mantener la discusión en medios masivos sobre ``grupos guerrilleros de papel'', pues de lo contrario ``nunca avanzaremos en la solución de los problemas sociales''.

Sostuvo que México ha esperado 80 años para vivir en un régimen democrático y ``apenas se empieza a abrir el ostión'', por lo que llamó a no precipitar los acontecimientos porque ``lo único que produciría sería un efecto nefasto''.

Exhortó a entender que esta transición ``nos va a consumir otros diez años'' y llamó a todos los sectores a evitar expresiones que ahuyenten al capital, para impedir que el país siga sumido en la miseria.

Pronosticó que en 1997 la sociedad observará de cerca la actuación del mandatario y si podrá convertirse en el líder del cambio estructural del sistema político y de la consolidación del desarrollo económico.

Por otra parte, el dirigente de la Coparmex afirmó que el Ejecutivo federal actuó dentro del marco de sus facultades para determinar la remoción del ex procurador Antonio Lozano Gracia y advirtió que los resultados deben determinar la permanencia o no de los funcionarios públicos. (Humberto Ortiz)