La Jornada 8 de diciembre de 1996

Anuncia Havelange su retiro después del Mundial 98

Agencias, Barcelona, 7 de diciembre El brasileño Joao Havelange, presidente de la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA), anunció su retiro para después del mundial de Francia, al afirmar que no aspirará a un nuevo periodo. El anciano de 80 años precisó: ``Ha llegado el momento de decirles que, tras largas y maduras reflexiones, he tomado la decisión de poner fin en 1998, de una manera definitiva, a mi mandato de presidente de la FIFA''.

En conferencia de prensa, que eclipsó el anuncio del acuerdo entre Corea del Sur y Japón sobre la organización conjunta de la Copa del Mundo del año 2002, agregó: ``Quiero irme en las mejores condiciones. No quiero que se diga que se trata de un viejecito que se va y que no hizo nada durante los últimos años de su mandato''. Subrayó que no intervendrá en la designación de su sucesor; ``es una decisión personal que pertenece a cada uno o a las confederaciones que designarán a los eventuales candidatos''.

Joao Marie Faustin Godefroid Havelange, su nombre completo, nació el 8 de mayo de 1916 en una familia de origen belga, en Río de Janeiro, donde concluyó estudios de derecho a los 20 años.

La muerte prematura de su padre lo llevó a trabajar en la empresa de la familia, que luego abandonó para entrar en la Viacao Cometa, una compañía de autobuses que se convirtió en la más grande de transportes públicos de Brasil. Desde joven practicó la natación y fue campeón de Río de Janeiro, de Sao Paulo y sudamericano; también jugó waterpolo.

Como deportista fue a los Juegos de Berlín 36, Helsinki 52 y a Sydney 56, ya como dirigente. En los años cincuenta participó en la administración y dirección de numerosos clubes de waterpolo de Río de Janeiro y de Sao Paulo, y en las federaciones de natación.

En 1958 asumió la presidencia de la Confederación Brasileña de Deportes, y desde 1959 también la de Futbol. De las cinco copas mundiales que jugó Brasil durante la gestión nacional de Havelange, el país se llevó tres (58, 62 y 70). Y por fin, en junio de 1974, en Frankfurt, durante el 39 congreso de la FIFA, Havelange le ganó la elección con 16 votos más al inglés Stanley Rous, aprovechando la imagen de Pelé, para convertirse en el séptimo presidente de la federación.

Hoy, en una muestra de su vigente autoridad, Havelange logró hacer adoptar a los comités de Sudcorea y Japón el reparto equitativo del número de partidos del primer mundial del nuevo milenio, que abrirá en Pyongyang y cerrará en Tokio. Para evitar problemas, habrá dos comités organizadores diferentes, con uno más de cordinación, que será controlado por la FIFA, y cada país podrá elegir su propia mascota.

Por otra parte, el dirigente dijo que no está de acuerdo con que el futbol sea retirado de los Juegos Olímpicos, como él mismo dejó entrever recientemente, sino que éste debe ``recibir un mejor reconocimiento''. Añadió que su último combate será por la admisión del futbol de sala en las justas cuatrienales, así como para hacer repuntar a su equipo, el Fluminense, que recién cayó a la segunda división. E insistió que se irá ``con la conciencia de haber hecho mucho por este deporte''.