EL gobierno, rebasado en salud pública: Ssa

Roberto Garduño Espinosa El secretario de Salud, Juan Ramón de la Fuente, al aceptar ayer que 10 millones de mexicanos se encuentran marginados de servicios básicos, reconoció que el crecimiento poblacional de la última decada rebasó la capacidad del gobierno federal para atender a los sectores más desprotegidos.

El funcionario expuso que si no se alcanza el equilibrio entre el crecimiento de la población y la oferta de estos servicios, los problemas van a persistir sin que se prevea una solución pronta.

``Lo que nos ha ocurrido es que en este país ha habido un crecimiento que ha rebasado las posibilidades reales de la nación para ofertar los servicios básicos, que ha sido más rápido el crecimiento poblacional que el enorme esfuerzo que ha hecho la sociedad mexicana en poder ofertar estos servicios básicos'', afirmó.

Al clausurar un encuentro médico en el hospital Angeles del Pedregal, el doctor De la Fuente destacó que la política poblacional requiere ``decisiones sensatas'', porque el crecimiento demográfico se constituye como el problema más importante en el país y las tasas actuales de fecundidad aún son insuficientes.

En ese sentido, destacó que el aumento de la población ha rebasado la oferta de los servicios básicos. Y ese fenómeno se complica en estados como Chiapas, Guerrero, Michoacán e Hidalgo, que es donde se presenta un ``círculo vicioso'' entre la escasez de servicios y la creciente demanda de los habitantes.

Ante especialistas nacionales y extranjeros, De la Fuente recordó que el aborto sigue representando altas tasas de mortalidad entre las mujeres, y que a pesar de ser un tema controvertido éste deberá dilucidarse entre la opinión pública.

En torno a cómo enfrentará el gobierno mexicano el crecimiento de la población, el secretario de Salud señaló que éste tiene la obligación de entregarle a todas las mujeres los métodos más modernos de planificación familiar:

``No vamos a ceder para seguir otorgando la información y los métodos anticonceptivos. No vamos a ceder a ningún tipo de presiones'', puntualizó.

Durante su larga exposición dijo que uno de los retos de la descentralización de los servicios de salud será incrementar y hacer un uso más racional de los recursos económicos, porque ``el problema no es de recursos, sino de cómo asignarlos'', señaló, en alusión a que en Estados Unidos el 15 por ciento del producto interno bruto se canaliza a la atención de la salud, pero existen 30 millones de personas que no gozan de ese servicio.

Al señalar la descentralización como el punto clave del actual sexenio, planteó como objetivos incrementar la calidad de los servicios, aumentar la cobertura y disminuir la causa expositiva sobre la nómina para ampliar la formalización de la economía, es decir, dar cabida a la economía informal.