Educará el clero en tv sobre sexualidad
Jesús Aranda La Arquidiócesis de México iniciará la próxima semana una ``sólida'' campaña de cuatro spots en televisión y dos más en radio, sobre el papel de los padres en la educación sexual de sus hijos. Esta publicidad --que será la primera de su tipo que realiza la Iglesia católica en la historia-- tendrá como objetivo hacer ver a los padres de familia la responsabilidad que tienen en el tratamiento de este tema ``tan delicado e importante''.
Lo anterior lo informó el arzobispo primado de México, Norberto Rivera, quien destacó que en esta campaña --que se prevé tenga una duración inicial de 15 días-- participarán desinteresadamente las empresas Televisa, Televisión Azteca y Multivisión, las cuales asumirán los costos de la transmisión de los spots, que duran 20 segundos cada uno. Asimismo, voceros de la Arquidiócesis confirmaron que ésta se encuentra en pláticas con medios impresos para explorar la posibilidad de que los diarios también ``donen'' espacio para este fin.
Luego de dar a conocer la carta pastoral La familia educadora de la sexualidad, el arzobispo Rivera criticó las campañas gubernamentales de control natal y sostuvo: ``Nosotros no creemos en las medidas veterinarias; creemos en las medidas educacionales, que son más largas, más difíciles, más complejas, pero que finalmente son las únicas que pueden transformar al ser humano''.
La humanidad, enfatizó, no va a cambiar porque se multipliquen los plásticos, ``porque se multipliquen los preservativos o porque vengan las esterilizaciones''.
Spots publicitarios
Después del anuncio que se hizo en la conferencia de prensa sobre los spots, el arzobispo Rivera se dirigió al octavo piso de la mitra metropolitana, en donde se efectuó el seminario arquidiocesano La familia, educadora de la sexualidad.
Ahí el encargado de la Pastoral de la Familia de la Arquidiócesis, Cipriano Sánchez, habló de la importancia de la campaña publicitaria, y explicó que el costo de la misma fue sufragada por la empresa de publicidad Terán-TBWA, y qué cadenas televisivas transmitirán los mensajes, aunque, reconoció que aún queda por definirse los horarios en que pasarán al aire y la frecuencia de los mismos.
El director de la agencia publicitaria, José Alberto Terán, dijo a su vez que el tema era ``delicado'' y que requirió de un tratamiento especial. Además precisó que los anuncios competirán ``con todo lo que está en el aire''. Sostuvo que los mensajes son convincentes y claros, y que se buscó que los padres entiendan y asuman su responsabilidad como los principales educadores de la sexualidad de sus hijos.
Así se dio paso a los mensajes:
En el primer anuncio aparece un bebé al que sus padres le están enseñando a caminar y se oye una voz:
``Han estado con ellos para apoyar a su hijo a dar sus primeros pasos; cuando empiece a despertar, no lo dejen solo; no permitan que camine hacia un futuro incierto. Prepárenlo; la educación sexual es su responsabilidad como padres''.
En el segundo anuncio una niña le pregunta a su padre: ``Papá, ¿qué es sexo?'' Y éste responde: ``¿Qué cosa?''. Una tercera voz dice: ``Educarlos en el amor y en la sexualidad no es un chiste, es algo muy serio. Prepárense, la educación sexual es su responsabilidad como padres''.
En el tercer anuncio aparece una niña a la que se ve que una mano le tapa los ojos, los oídos y la boca. Se oye una voz que dice: ``Sexo. No pueden cerrarle los ojos a la realidad ni impedir que la escuchen. No pueden evitar que pregunten. Mejor que descubran el amor y la sexualidad a través de ustedes. Prepárenlos, la educación sexual es su responsabilidad como padres''.
El cuarto y último anuncio fue el que llamó más la atención de los presentes, e incluso provocó la sonrisa por la forma que está hecho. Aparece en pantalla un niño que le dice a otro al oído: ``El sexo es natural''; éste le dice a otro: ``El sexo es normal''; éste se dirige a un tercero: ``El sexo es un mal''; a su vez, este último agrega: ``El sexo es mortal''.
Una tercera voz dice: ``La información sobre el amor y la sexualidad les puede llegar distorsionada. Prepárenlos, la educación sexual es su responsabilidad como padres''. Y reaparece en pantalla un niño que le dice a otro: ``Te vas a morir'', la cara de espanto del pequeño que recibió el último mensaje es más que elocuente.
Asimismo, se escucharon los dos mensajes de radio:
``Sexo. Sus hijos pueden escucharlo con un lenguaje vulgar o con un lenguaje de amor. Y ustedes -pregunta la voz-, ¿cómo quieren que hablen de la sexualidad? Para que se expresen con amor, hablen con ellos. Prepárenlos, la educación sexual es su responsabilidad como padres''.
Y el último mensaje dice:
``Sexo. Sus hijos pueden asociarlo con excesos, libertinajes o asociarlo con el amor. Y ustedes, ¿cómo quieren que vean el sexo? Para que lo vean tan bello como es el amor, hablen con ellos. Prepárenlos, la educación sexual es su responsabilidad como padres''.
El sexo es amor, no simple objeto de placer
El religioso mostró su preocupación por la difusión ``banal'' de la sexualidad en los medios de comunicación, lo que hace ver el sexo en un nivel ``meramente fisiológico o anatómico''.
El sexo, insistió, puede llegar a convertirse en un ``simple objeto de placer'' y no en el signo de donación amorosa de un hombre y una mujer.
Rivera Carrera precisó que en este contexto la sexualidad debe estar integrada en la persona a través de la educación, que permita la vivencia de la sexualidad; ``no como una actitud represiva, sino como un don precioso y enriquecedor, como el del ser humano, como el don del amor''.
Respecto a los métodos de control natal, dijo que es falso que la Iglesia católica se oponga a éste y recordó que, incluso, la doctrina cristiana habla de la paternidad responsable. Sin embargo, dejó en claro que hay métodos ``naturales'' de control natal, y que el gobierno también está en la obligación de difundir no sólo los ``antinaturales'', como son los preservativos o anticonceptivos.
Insistió en que la educación de los padres es el principal vehículo para el desarrollo sexual de los hijos y destacó la labor desarrollada en este sentido por las llamadas ``escuelas para padres'', organizadas por los colegios confesionales, así como los cursos parroquiales en los que se orienta a los padres sobre el tema. Al mismo tiempo, instó a los padres de escuelas oficiales a que se organicen para que orienten la formación de sus hijos ``conforme a sus principios, conforme a sus propios valores''.