Participación privada ``débil'' mientras no se reactive el mercado interno: Larios
Dirigentes empresariales asumieron ayer que el sector exportador no ha podido generar los empleos que requiere el país ni ha sido capaz de jalar en su desarrollo a otros segmentos de la economía. La ``abrupta'' apertura comercial, reconocieron, provocó un ``shock importante'' en buena parte de la planta productiva.
Las ventas externas, afirman, han significado fuertes transferencias en dólares a México, pero en beneficios ocupacionales su contribución ``es muy limitada'' y éste, alertan, es ``el problema más grave'' porque muchas factorías aún enfrentan el riesgo de desaparecer.
Lorenzo Zambrano, presidente de Cementos Mexicanos (Cemex), y Juan Diego Gutiérrez Cortina, del grupo GUTSA, garantizaron proyectos de inversión para reactivar el mercado interno en el 97, apoyados en buena medida por el gasto público, y prometieron mantener en 20 por ciento anual el crecimiento de las exportaciones.
``No veo inconformidad por ningún lado. México está muy bien'', dijo Zambrano con regocijo.
En ese sentido, Héctor Larios Santillán, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, juzgó que en este momento el desempleo es el problema más grave del país.
Afirmó que lo más importante es generar plazas de ocupación y, por ende, subrayó que al término de este año se prevé llegar a 700 mil fuentes de trabajo, en tanto que la meta para el 97 es crear 100 mil más, aun cuando prevalece el riesgo de desaparición de empresas.
Entrevistado durante la inauguración del Congreso Nacional de Arquitectura, pugnó por planear puntualmente el rumbo del país, porque la población está cansada de la improvisación de políticas económicas.
Dijo además que la inversión privada se mantendrá ``debilitada'' mientras no se reactive el mercado interno, y explicó que un número importante de empresas mexicanas presenta severos síntomas de ``agotamiento'' financiero y están en peligro de desaparecer, lo cual agravaría más el problema del desempleo.
Hizo ver que, por fortuna, el país ha pasado la parte más grave de la crisis. Sin embargo, dijo que no se puede presionar un mayor desgaste del sector productivo, pues muchos negocios se encuentran en su límite de sobrevivencia.
Comentó que una parte sumamente importante para salir de la recesión es la cuestión social, por lo que se tendrá que trabajar en programas conjuntos para la atención de las clases que se encuentran en la extrema pobreza, si es que se quiere realmente evitar que se puedan producir estallidos sociales.
Al respecto, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), Carlos Rojas -quien asistió también-, informó que para el próximo año el gobierno federal invertirá en el programa de Cien Ciudades más de 600 millones de pesos.
Bajo este programa se realizarán 217 proyectos que incluyen 400 obras en materia de vialidad, transporte, ecauzamiento de ríos, manejo de residuos sólidos, reactivación económica de diversas ciuda- des y modernización catastral, como parte de la política de desarrollo urbano, orientada a una distribución equilibrada de la población en el territorio y el desarrollo económico de las ciudades, dijo.
A su vez, entrevistados en el acto con que pusieron en marcha un proyecto más del ``Fideicomiso Cooperamos'', orientado a la edificación de obras de beneficio social en el Distrito Federal, los influyentes empresarios Zambrano y Gutiérrez Cortina convocaron a unir recursos del gobierno y del sector privado para generar empleo.
A juicio de Zambrano, la economía va ``mucho mejor de lo que algunos esperaban'', y el año terminará ``bien y viendo hacia arriba''. La gran mayoría de las empresas, asegura, se la juega con México e invierte sus capitales en el país.
Pero en opinión de Gutiérrez Cortina, presidente del grupo GUTSA, la recuperación del país depende en mucha medida de la reactivación del mercado interno y de ``una clara visión de que vamos por el camino correcto''.
Reducir el IVA, pide Sada
En Monterrey, entrevistado por La Jornada, el empresario panista Rogelio Sada Zambrano demandó reformar el modelo económico y el sistema judicial mediante fórmulas encaminadas a reducir la miseria. Exigió al gobierno federal, como primera medida, reducir el IVA del 15 al 10 por ciento para aminorar el castigo sobre las clases media y baja de la sociedad.
``El fantasma de Salinas'', expresó, pesa aún sobre la economía nacional ``porque, a dos años del error de diciembre de 1994, el país no ha logrado superar los efectos de la crisis'', cuyo saldo ha sido catastrófico.
Al respecto, Guillermo Beltrán Pérez, director de Estudios Económicos de la Caintra de Nuevo León, informó que la actividad industrial regiomontana se ha debilitado en los últimos dos años y actualmente las empresas operan en promedio a 60 por ciento de su capacidad instalada, mientras que las pequeñas y medianas industrias trabajan a 49.2 por ciento. (Humberto Ortiz, Antonio Castellanos, Angélica Enciso, Patricia Muñoz y Armando Torres, corresponsal.)