Las acciones oficiales no terminan con el corporativismo de líderes callejeros ni la extorsión de inspectores, señala el Frente de no Asalariados
Alberto Nájar y Pascual Salanueva El presidente del Frente de Trabajadores No Asalariados (FTNA), Fernando Sánchez Ramírez, afirmó ayer que el gobierno capitalino se equivoca si cree que puede controlar el ambulantaje con el cobro del derecho de piso o con la asignación de gafetes, porque además de propiciar el incremento de la corrupción, no soluciona el problema de fondo.
En entrevista, dijo que el dinero recaudado por el derecho de piso debe destinarse a un fideicomiso especial para modernizar el comercio popular, el cual, además de proporcionar recursos para construir plazas, serviría para apoyar a las familias de los ambulantes. ``No se vale que el dinero que aportemos se use para contratar más policías que vengan y nos garroteen'', dijo.
El fideicomiso podría crearse con una aportación inicial del gobierno capitalino, y posteriormente ``tendría recursos ilimitados porque los comerciantes generamos impuestos todo el año, pocos, pero siempre hay''.
Hasta ahora la solución adoptada por las autoridades es ``irreal'', además de injusta, pues ``siempre en estos tiempos llegan más de tres mil comerciantes de todo el país; es la mejor época y además tienen más de 50 años en la vendimia''. Los gafetes, pues, resultan insuficientes.
Pero además, con estas acciones no se termina con el corporativismo que ejercen los líderes ni tampoco se frenan las extorsiones de inspectores de Vía Pública, añadió.
A su vez, la lideresa de vendedores ambulantes, Alejandra Barrios Richard, manifestó que si el problema de los vendedores ambulantes es que no pagan, ``vamos a hacerlo, ya que lo único que pedimos es que nos dejen trabajar en paz y dejen de perseguirnos como si fueran delincuentes'', y agregó que sus agremiados están dispuestos a salir del Centro Histórico y no volverlo a invadir siempre y cuando se les garantice que tendrán plazas comerciales donde los compradores asistan.
Sobre el cobro de derecho de piso que pretende hacer valer a partir del próximo 15 de enero la ARDF, Barrios Richard repuso que no hay ningún inconveniente por parte de los vendedores ambulantes, pues lo único que piden éstos es que se les deje trabajar y en ese sentido, dijo, ``estamos dispuestos a jalar parejo con el gobierno''.
Al preguntársele su opinión acerca de que esta recaudación de impuestos que hará el gobierno capitalino de ninguna manera puede tomárse como una forma de legalizar el comercio ambulantes, indicó: ``Yo creo que sí puede legalizarlo, lo que pasa es que hay temor de que tenga uno derechos en la vía pública y es por eso que van a hacer el cobro así, sin el compromiso de que uno adquiera legalidad en alguna zona''.
En este sentido, la dirigente dijo que el comercio es legítimo y si la gente se dedica a ese rubro es porque no existe trabajo y cuando lo hay éste es mal remunerado y por eso en este año que está a punto de terminar el número de comerciantes creció enormemente, aun cuando no proporcionó cifras.
Del problema que actualmente existe con los toreros externó que es una situación que no puede combatirse tan fácilmente, ya que es gente necesitada de trabajo y llevar de comer a su familia.
Asimismo, informó que el gobierno capitalino convocó a todos los líderes de comerciantes ambulantes, para que a inicios de 1997 discutan y elijan las mejores opciones para el comercio informal y sobre la creación de nuevas plazas comerciales que, a decir de la entrevistada, serán aceptadas, siempre y cuando sean ``ampliamente comerciales''