La Jornada 21 de diciembre de 1996

Busca la Secofi incluir el comercio informal en el registro público

Humberto Ortiz El gobierno federal no dejará de apoyar la economía de la población de menores ingresos porque ésta es ``una línea sin reservas '', aseguró Eugenio Carrión, subsecretario de Comercio Interior de la Secofi.

Mencionó el caso de la tortilla, cuyo precio en el libre mercado sirve de referencia para nuevas reglas comerciales y para la aplicación de subvenciones. Con base en esa cotización se descontará el costo en la compra del maíz, sostuvo.

Por otra parte, anunció la revisión del registro público del comercio en todo el país, como parte de un proyecto orientado a incorporar a la economía informal.

Adelantó también que en 1997 deberá concretarse la modernización y concesión de rastros municipales a rastros privados, ``o el cierre de viejas instalaciones locales que no pueden mantenerse''.

Explicó que el objetivo es invitar a los negociantes a desarrollar sus capacidades de gestión para manejar sus establecimientos; además, se les otorgará apoyo en materia contable, compra de productos, arreglo de mercancías en los anaqueles y presencia de exteriores e interiores de sus locales.

El subsecretario comentó que una tercera etapa será el Programa de Apoyo Financiero, orientado para ``todo aquel que pueda soportar un financiamiento de las instituciones de banca de desarrollo''.

Para ilustrar los avances y alcances de este plan, mencionó Carrión que en este año se capacitó a tantos comerciantes como en toda la administración pasada: más de 50 mil personas.

Comentó que ya ha visitado diez estados donde opera esta estrategia, cuya cobertura se centra en los giros mayoritarios del comercio en México: tablajerías, abarrotes y farmacias que, dijo, suman cerca de la mitad de los establecimientos.

En cartera vencida, 40%de las centrales de abasto

Carrión dijo que alrededor de 40 por ciento de las centrales de abasto han caído en cartera vencida por los problemas financieros de los locatarios.

Aseguró que la desregulación ha sido lenta, pues algunos centros se abrieron pero sin suficiente normatividad que garantizara que los viejos comerciantes mayoristas de las ciudades se trasladaran a las nuevas instalaciones.

Explicó que este problema tiene su origen en la reglamentación antigua que les permitía estar en las centrales vetustas, por lo que la ocupación de las nuevas instalaciones ``requiere también de un enfoque desregulatorio o regulatorio apropiado''.

Por lo que hace al comercio informal, el subsecretario Eugenio Carrión consideró que aun cuando las autoridades federales no tienen injerencia directa en el problema, la Secofi puede influir para interesar a los comerciantes en formalizar sus operaciones.

Insistió en que la desregulación es importante, pues ``si alguien quiere poner un negocio y lo opera fácilmente, lo invitaremos a formar parte del comercio organizado''.

Si alguien tiene la seguridad de que sus transacciones mercantiles no tienen riesgo alguno, tendrá incentivos para formalizar su negocio, remarcó.