En 97, el retorno de María Félix al cine
Raquel Peguero Tras 26 años de ausencia de la pantalla grande, La Doña pisará de nuevo los plató, esta vez bajo la dirección del André Techiné, en una coproducción franco-mexicana que lleva como título provisional Enamorada en París.
``¿Y usted como se enteró?'', pregunta María Félix tras la línea telefónica. Aclarada la duda, con entusiasmo y sin trabas agrega: ``Le confirmo la noticia porque ya la sabe y porque La Jornada es un periódico que me resulta muy simpático''.
Enamorada en París nació de un encuentro que tuvo María en la Ciudad Luz con el director de Los ladrones a principios de este año. ``André quería conocerme porque me admiraba desde siempre. La idea de hacer una película juntos primero fue como un chiste: quería filmar mis travesuras parisinas en los años 50, porque le parecía fabuloso todo lo que yo había logrado en esa ciudad que no se sorprende por nada. Yo no estaba convencida de que fuera tan buena idea como para que retornara al cine, porque documentales hay muchos y suelen ser aburridos. Después de algunos encuentros, y viendo que él sabe dirigir a grandes actrices y es muy imaginativo, le dije que aceptaría si hacíamos algo ficcionado, donde yo pudiera mostrar que mi calidad de actriz sigue viva. Así fue tomando forma este proyecto fabuloso. Sólo con algo que tuviera esa palabra mágica en mi vida yo podría volver al cine y, bueno, ¡ya volví!'', dice con una risa.
La historia, cuenta, mostrará a una María desconocida para los mexicanos: la María parisina. ``María la mexicana'' como la llaman allá. ``Quería algo distinto, las Valentinas y las revolucionarias ya no son para mí, ya las filmé y son mi parte de México; ahora quiero darle algo más a los mexicanos, para que ya no estén tan tristes: quiero darles algo que brille de otra forma, y de paso reconocer todas las atenciones que los franceses han tenido conmigo. Ya ve que hasta me hicieron Comendadora y me dieron una medalla --que ninguna mujer latinoamericana tiene--, que dediqué al cine mexicano y al francés porque los dos han sido mi casa''.
Enamorada en París no es un filme autobiográfico, ``tampoco llego a esos extremos de contar tanto, pero sí tendrá algunas cosillas verdaderas, ¡y póngale así!: cosillas, todo ese mundo que me rodeó cuando fui la reina en los hipódromos europeos; los caballos fueron una pasión para mí por mucho tiempo, y tuve caballos hermosos y triunfadores''.
También aparecerán personajes importantes con los que tuvo amistad y relación como Jean Cocteau; Jean Paul Sartre, ``que era muy pesado''; Colette, ``una viejita encantadora con ideas muy frescas''; Sacha Guitry, que era ``toda mordacidad y sarcasmo, pero me admiraba; mi querida Leonor Fini, que me presentó a Jean Genet, a Max Ernst, a Balthus y que hasta me regaló un hombre''. Aparecerán también ``el loco'' de Salvador Dalí y, por supuesto, ``mis directores'': Jean Renoir, Luis Buñuel, Yves Ciampi, Richard Pottier y ``mis galanes'' como Jean Gabin, Yves Montand y Michel Piccolli.
A la actriz se le escucha emoción en la voz cuando asegura que en estos momentos debe estar listo el último tratamiento del guión de su película --también escrito por Techiné-- y que sólo falta ``mi visto bueno'', después de las fiestas de Año Nuevo que pasará en París. Los preparativos de preproducción comenzarán en la segunda quincena de enero, si el guión es aprobado por ella, y la filmación en marzo. La primera locación será en los Campos Elíseos.
La noticia de su retorno al cine la iban a dar en la inauguración de ``mi sala en Polanco'', durante el Festival de Cine Francés. ``Pero André tuvo algún problema y ya no pudo venir a México como estaba planeado, así que decidimos seguir guardando la noticia hasta que pudiéramos darla juntos''.
--¿Esta será su despedida del cine?
--¡Despedida! ¿Por qué? ¡Qué cosas dice! ¡Es una bienvenida! Y todavía habrá más: hay María Félix para mucho tiempo..