Tepito, paraíso de venta y almacenaje de productos no originales
En sus calles, en sus más de tres mil puestos semifijos, hay mucho más que inseguridad. La vastedad de las ofertas es poca comparada con la mercancía que se oculta en las vecindades habilitadas como bodegas, y que según datos oficiales hacen de Tepito el mercado de productos falsificados más grande del país.
Ahí se vende ropa de todas las marcas, incluso las que oficialmente no existen en México. Ahí también se copia tal cantidad de fonogramas y videocasetes que casi triplica la producción nacional, calculada en 55 millones de piezas al año.
Las ofertas son variadas: relojes Rolex o Gucci de 100 a 500 pesos, o los ``originales'' --como los ofrecen los vendedores-- de mil 200; pantalones Levi's de 130, o Guess de 170 pesos; camisetas Nike de 50; tenis Reebok a 120; perfumes Polo, Channel Paloma Picasso o cualquier marca que desee, de 200 a 250 pesos el frasco de 100 mililitros.
Y de acuerdo con lo que pretenda adquirir, es la calle por la cual debe caminar. Por ejemplo, tenis en Tenochtitlan; videocasetes en Aztecas, y pantalones o camisetas en el Eje 1. La mercancía en su mayoría es falsa --o bien producto del robo--, aunque la calidad de la reproducción en algunos casos es tal que se necesita algo más que experiencia para detectarlo.
Cinco kilómetros al sur, en el Eje Central Lázaro Cárdenas, está la Plaza Meave, que es de hecho una copia del famoso Tepito, y a pesar de estar en un espacio reducido se ofrecen los mismos productos, ya sea colgados en rejas o en exhibición sobre anaqueles. Hay de todo, hasta la carga de violencia que convierte a ambos en lugares virtualmente inaccesibles para las autoridades.
Los testimonios no dejan lugar a dudas: Ernesto Soriano, Fiscal Especial para Delitos contra la Propiedad Intelectual e Industrial, dice que hace más de un año que está virtualmente vedado el ingreso a Tepito, y no es nada fácil entrar sin riesgo de provocar un pleito de proporciones mayúsculas.
Héctor González, representante legal de Hard Rock Café y Planet Hollywood, confiesa que durante los operativos contra la piratería, los agentes de la Policía Judicial Federal sudan la gota gorda para contener la ira de los afectados.
Con las armas en la mano, rodeados por los tepiteños, apuran a sus compañeros para que termine lo más pronto posible. ``Güerito, tienes 15 minutos para el operativo, antes de que salgamos disparados de aquí'', es la frase que se repiten los elementos de la Federal.