México seguirá impugnando la extraterritorialidad: SRE
David Aponte Ť El gobierno de México aprovechará todos los medios legales a su alcance y los espacios de diálogo en los foros bilaterales, regionales y multilaterales para impugnar la validez de los aspectos extraterritoriales de la ley Helms-Burton, limitar el impacto de su aplicación y salvaguardar los intereses legítimos de las empresas mexicanas en el extranjero, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Al conocer la determinación del presidente Bill Clinton de postergar por segunda ocasión la entrada en vigor del Título III de la legislación estadunidense, la cancillería mexicana expuso que la decisión ``constituye un esfuerzo por recoger la opinión de la comunidad internacional expresada de manera unánime desde el momento en que la ley fue puesta en vigor (el 12 de marzo de 1996)''.
Sin embargo, el gobierno de México debe insistir en su rechazo a los aspectos extraterritoriales de la Helms-Burton, mismos que son contrarios al Derecho Internacional y, sobre todo, al principio fundamental de no intervención en los asuntos internos de otras naciones, manifestó.
La oficina encargada de la política exterior del país ha expuesto que la notoria incompatibilidad de la ley estadunidense con el Derecho Internacional explica el repudio de que ha sido objeto en México, Canadá, el Grupo de Río, el Caricom, Rusia y la Unión Europea.
En un comunicado de prensa enviado este viernes por la tarde, luego de que el presidente Clinton utilizó la facultad que la otorga la sección 306 (b) de la ley de referencia para suspender por seis meses la entrada en vigor del Título III, la cancillería mexicana indicó:
``El gobierno de México reafirma la necesidad de resolver cualquier diferencia internacional a través del diálogo abierto y respetuoso, ajeno a medidas unilaterales y de confrontación. Asimismo, reitera su llamado a la comunidad internacional para continuar promoviendo un comercio libre y justo.
``El gobierno de México continuará aprovechando todos los espacios de diálogo con que cuenta en los foros bilaterales, regionales y multilaterales, para evitar que dicha disposición afecte los intereses de los ciudadanos y las empresas mexicanas en el exterior'', agregó.
El 20 de diciembre pasado, los gobiernos de México y Canadá determinaron acudir como tercera parte al panel de controversias convocado por la Unión Europea en el seno de la Organización Mundial de Comercio, y explorar nuevas formas de impugnación de la ley Helms-Burton en los instrumentos que ofrece el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Durante la visita a México del enviado especial del presidente Clinton, el embajador Stuart Eizenstat, realizada el 28 de agosto de 1996, los representantes del gobierno mexicano pidieron la revocación de los negativos aspectos políticos y jurídicos de la Helms-Burton, fundamentalmente de los títulos III y IV.
El Título III considera la posibilidad de entablar litigios contra las empresas de terceros países que tienen negocios con La Habana, principalmente con bienes confiscados por el gobierno de Cuba. El apartado IV hace posible la revocación de la visa de entrada a Estados Unidos a los empresarios o ejecutivos cuyas empresas tienen nexos económicos y comerciales con la isla.
En un informe de circulación interna, la SRE consideró que la eventual aplicación del Título III, actualmente suspendida, ``impactaría negativamente la actividad productiva, exportadora y de servicios de numerosas empresas mexicanas en sectores vitales para la recuperación económica del país.
``Adicionalmente, provocaría conflictos de carácter legal que podrían afectar el diálogo y la cooperación que han prevalecido en la relación entre México y Estados Unidos''