OBJETIVO: ELIMINAR TODO RASTRO DE AMBULANTES
La Alameda Central y el Centro Histórico mostraron ayer un rostro que hace mucho tiempo no veían los capitalinos: calles, pasillos y andadores limpios, y sobre todo, libres de comerciantes ambulantes.
Por fin la gente pudo caminar tranquilamente por las aceras sin ningún obstáculo; se encontró con tiendas de ropa, mercerías o restaurantes que ``nunca había visto'', a pesar de ser su ruta diaria. De hecho, la calle Corregidora, que desde el pasado 15 de diciembre había sido cerrada a la circulación vehicular desde la Plaza de la Constitución hasta Circunvalación, se reabrió.
La falta de clientes en los primeros días del año se dejó
sentir hasta en las ferias de la Alameda.
Foto: Fabrizio León
Incrédulos, varios comerciantes establecidos manifestaban sus dudas sobre el retiro definitivo de los vendedores de vía pública y consideraron que esa situación no durará mucho tiempo. ``Si no se ven muchos ambulantes es porque hoy hace un recorrido por este lugar el regente... aquí lo estuvieron comentando unos policías con los mismos vendedores, yo creo que mañana volverá a ser como siempre'', consideró el encargado de una tienda de ropa infantil.
A pesar de todo, el centro de la ciudad y la Alameda quedaron despejadas. En las calles de esas zonas sólo se observaban los tradicionales boleros y los puestos de revistas y periódicos. Ni siquiera los toreros, que tantos dolores de cabeza dieron a los policías durante la temporada decembrina, se pararon en las esquinas. Ahí sólo se observaban algunos granaderos, policías de Transformación 2000 o inspectores de vía pública.
Por su parte, el dirigente de los vendedores invidentes, Miguel Angel Huerta, expresó que no saldrán a las calles hasta no llegar a un acuerdo satisfactorio de reubicación con las autoridades del Departamento del Distrito Federal (DDF). De ser así, ``se podrá evitar la anarquía que se vivía ya en esta zona, y que estaba afectando los intereses de todos, de los capitalinos, de los vendedores de las autoridades, de los comerciantes establecidos, de todos''.
Atrás quedaron los días de los empujones, los robos a discreción y las 3 mil 100 toneladas de basura recolectadas la noche del lunes. Al menos por un día, el Centro se mostró como muchos capitalinos lo desean.
Por otra parte, el dirigente del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM), Carlos Guzmán Pérez, consideró que la delegación Cuauhtémoc otorgó 9 mil permisos a ambulantes y no 3 mil, como insistentemente manejó. En entrevista, señaló que dichas autorizaciones ``se otorgaron a los líderes que aportaron una fuerte suma de dinero para apoderarse de los mejores espacios en la Alameda, el Centro Histórico y hasta la Avenida Juárez''.
Mientras, en Azcapotzalco, el delegado Pablo Casas Jaime informó que ya inició en esa jurisdicción el programa de ordenamiento del comercio en vía pública, con lo que 100 ambulantes de la avenida Azcapotzalco y Eje 3 Norte fueron reubicados. El funcionario precisó que en el programa se incluirán a 2 mil 915 vendedores informales y que se usará el diálogo y la concertación. (Raúl Llanos y Karina Avilés).