La Jornada 10 de enero de 1997

Marcos: el gobierno se resiste a reconocer en la Constitución los derechos indígenas

Las Margaritas, Chis., 9 de enero Ť El gobierno federal se resiste a reconocer a nivel constitucional los derechos de los grupos indígenas del país, se niega a resolver las condiciones sociales de vida de las comunidades rebeldes y pretende un tratado de paz que implique la rendición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), acusó el subcomandante Marcos.

En una conversación con los medios de comunicación, poco después de platicar con el secretario general del Partido de la Refundación Comunista, Fausto Bertinotti, el jefe insurgente señaló que los zapatistas han planteado al gobierno del presidente Ernesto Zedillo una serie de demandas mínimas que ``significarían la firma del proceso de paz, pero no el desarme''.

En tanto, en la ciudad de México la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) continuó ayer las consultas con asesores del gobierno y especialistas en derecho constitucional, con quienes se prepara para el encuentro que sostendrá mañana con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en La Realidad, Chiapas, informó Rodolfo Elizondo, el vocero en turno.


Cuauhtémoc Cárdenas y Fausto Bertinotti, durante la
reunión de dirigentes de los partidos de la Revolución
Democrática y de la Refundación Comunista

Foto: Ernesto Ramírez

Luego del encuentro con el dirigente comunista más importante de Italia, el subcomandante Marcos dijo que el reconocimiento a nivel constitucional de los derechos y cultura de los grupos étnicos de todo el país, sería un paso importante para firmar la paz, pero el gobierno se niega a reconocerlo y ``por eso se han trabado las pláticas y apenas están por resolverse''.

``Que el gobierno entienda que no se está negociando la rendición del EZLN, sino el cambio de vía para su rebeldía armada y clandestina a una rebeldía pacífica. Ellos quieren que dejemos de ser rebeldes, que nos hagamos gobiernistas y que aplaudamos al neoliberalismo, y eso no lo vamos a hacer ni armados ni desarmados'', precisó.

El también vocero del EZLN afirmó que después de tres años es más difícil que se acuda al uso de las armas para solucionar el conflicto en Chiapas, sin embargo, agregó, la paz no está por definirse ``porque sigue pesando la lógica gubernamental de que es necesario vencer en la mesa lo que no pudo derrotar en el terreno militar''.

Al referirse a la toma de la embajada de Japón en Perú por el grupo guerrillero Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA), el subcomandante Marcos precisó que la lucha armada en América Latina ``no es un expediente cerrado, no por terquedad de los movimientos armados sino por incapacidad del sistema político de América Latina para dar alternativas de quehacer político a los rebeldes''.

Explicó que el modelo de democracia que se impuso en América Latina y que duró muy poco tiempo como alternativa de los régimenes totalitarios en Sudamérica, se agotó rápidamente por la acción del neoliberalismo, y eso implica también que los grandes grupos sociales y algunos sectores concientizados vean canceladas nuevamente las alternativas políticas y tengan que recurrir a las armas de nuevo.

El subcomandante Marcos y el secretario general del Partido de la Refundación Comunista, Fausto Bertinotti, intercambiaron experiencias y conversaron sobre el proceso de globalización económica. La delegación italiana invitó al Ejército Zapatista de Liberación Nacional a visitar su país en el presente año. La dirigencia del EZLN aceptó la invitación y también el subcomandante Marcos: ``si me dejan, viajaré'', respondió.

Por su parte, Bertinotti manifestó su solidaridad con los indígenas zapatistas y dijo que continuará pugnando porque el Parlamento italiano obligue al gobierno de ese país a exigir una solución pacífica al conflicto chiapaneco.

El dirigente zapatista también recibió a Marcos Pezzoni y Mario Brunetti, diputados del Parlamento italiano, quienes igualmente dialogaron con el presidente de la Comisión Nacional de Intermediación (Conai), Samuel Ruiz García; el gobernador del estado, Julio César Ruiz Ferro, y miembros de la Comisión de Concordia y Pacificación.

En la reunión de los italianos con la Cocopa se habló sobre el trabajo de coadyuvancia emprendido por esta comisión desde 1994.

Los legisladores europeos consideraron que si México sabe reformar el Estado, viendo en conjunto los problemas de la autonomía de los indígenas, eso dará una gran aportación a la democracia internacional.

Señalaron que al interior del sistema político mexicano hay dos posiciones, una que cree poder cambiar poco para neutralizar los empujes de la democracia, posición que tarde o temprano pone en crisis la economía mexicana y, por otro lado, gente que cree en un proceso de diálogo para llegar a la paz y a una profunda reforma del Estado. Agregaron que no es la postura del EZLN la que ha venido obstaculizando la concreción de los primeros acuerdos de San Andrés.

Los legisladores por el Partido Democrático de la Izquierda y miembros de la Internacional Socialista, estimaron que el obstáculo principal para la reforma del Estado es un intento del gobierno en ver la autonomía indígena como si las comunidades fueran una reserva de indios. (Juan Balboa y Angeles Mariscal, corresponsales, y Georgina Saldierna e Ismael Romero)