Cumple 90 días la huelga de hambre de los barrenderos; ninguna solución
El gobierno de Tabasco endureció nuevamente ayer su posición para resolver el conflicto de unos 300 de trabajadores de limpieza -siete en huelga de hambre y dos de ellos con 90 días de ayuno- al calificar de ``instigador'' a su representante legal, Aquiles Magaña, y acusar al senador del PRD Félix Salgado Macedonio de encabezar a ``un grupo radical de oposición'' que trata de desestabilizar al gobierno de Roberto Madrazo Pintado.
Mientras tanto, diversas organizaciones civiles, sindicales, estudiantiles y religiosas realizaron actos de apoyo en varias ciudades del país en apoyo a los trabajadores de limpia tabasqueños, y en el Distrito Federal Carlos Monsiváis, en un acto frente a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, pidió la solución al conflicto para que Venancio Jiménez Martínez y Jorge Luis Magaña Alamilla levanten su ayuno que cumplió 90 días.
``Por humanidad, debe impedirse que se mueran. Hay que interrumpir su huelga de hambre aunque ellos no quieran. Lo primero es salvar su vida y no seguir esperando a que la soberbia de Roberto Madrazo y la indiferencia de Ernesto Zedillo contribuyan al fallecimiento de esos hombres'', dijo el escritor.
Sin embargo, las negociaciones en la Secretaría de Gobernación continuaron suspendidas, sin que ninguna de las partes se haya presentado para discutir un acuerdo final al conflicto iniciado en julio de 1995.
Después de viajar a la ciudad de México para dar una conferencia de prensa, el secretario de Gobierno tabasqueño, Víctor Manuel Barceló, y el alcalde del municipio Centro de ese estado, Jesús Taracena Martínez, manifestaron estar dispuestos a cerrar el conflicto siempre y cuando se permita la atención médica de los dos ayunantes cuya salud es delicada y se acepte su propuesta de crear 190 plazas y la compensación a 110 ex empleados.
No obstante, los enviados de Roberto Madrazo rechazaron la propuesta de desistimiento de las órdenes judiciales contra 35 trabajadores y la creación de una empresa procesa- dora de basura manejada por ellos: ``No podemos tomar acuerdos que van más allá de esta administración municipal y tampoco violar la autonomía del Poder Judicial''.
Para el gobierno tabasqueño, el problema esencial que ha impedido llegar a la solución del conflicto es la ``politización'' a que ha sido sujeto y también la ganancia económica que espera obtener Aquiles Magaña.
Según el edil Taracena ``el señor Magaña pretende el pago de una cantidad cercana a los 20 millones de pesos, equivalente al 65 por ciento de los recursos aplicados por el ayuntamiento en el programa de combate a la pobreza, y que también representa 17 por ciento del presupuesto anual de los municipios'', aseguró en la conferencia a la que asistieron periodistas tabasqueños invitados por el propio gobierno de la entidad.
Barceló acusó directamente al senador perredista Félix Salgado Macedonio de encabezar ``a los grupos más radicales de oposición'' que presionan para que el conflicto continúe.
La negociación no se ha cerrado desde hace muchos meses; ``ha llevado los vaivenes que ha querido este movimiento que sólo pretende la desestabilización, una desestabilización que se da sola y desgraciadamente en algunos medios'', prosiguió Barceló.
El edil Taracena dijo que el ayuntamiento está dispuesto a solucionar el conflicto que ``ha orilllado a un ayuno estéril'' de 90 días a Venancio Jiménez Martínez y Jorge Luis Magaña Alamilla -en compañía de otros cinco más con la mitad de tiempo en ayuno- frente a la sede de la CNDH.
Rechazó que el origen del conflicto sea por la desobedencia a la instrucción de realizar tareas de limpieza en las casas y ranchos del alcalde y de Madrazo Pintado, pues ``ni el gobernador ni yo tenemos rancho''.
Es falso también, dijo, el acuerdo entregado a la prensa el 4 de enero en la Secretaría de Gobernación por el senador Salgado, en el cual se habla del retiro de las órdenes de aprehensión contra los ex trabajadores de limpia, acerca de lo cual señalaron que sólo pueden pedir que se ``acelere'' el proceso judicial pero no que se suspendan dichas órdenes.
Al mediodía, mientras los funcionarios tabasqueños pedían el levantamiento del ayuno, frente a la CNDH el escritor Carlos Monsiváis se manifestaba en el mismo sentido pero precisando que se tiene que llegar a una negociación seria y comprometida con los barrenderos. ``No vale la pena que se pierdan dos vidas y todo continúe igual'', dijo a su vez el senador Salgado.
Ambos participaron en el ayuno colectivo durante 12 horas, frente a la CNDH junto con miembros de más de 40 organizaciones civiles, políticas, religiosas y de derechos humanos. Una treintena de oradores externó su preocupación por la vida de Jorge Luis y Venancio, pero también su apoyo a este acto de lucha por hacer respetar sus derechos laborales. Empero, se reconoció que las organizaciones civiles, políticas y religiosas habían ``actuado con demasiada lentitud''.
Se habló de que ``si para el próximo día 15 este asunto no ha concluido, se invitará a la sociedad mexicana en general a realizar actos de protesta en todo el país''.
Ofelia Medina pidió que ``pare el genocidio de un desgobierno (sic) contra el pueblo digno de México'', mientras Superbarrio y Enrique Espino, por El Barzón, criticaron la insensibilidad del presidente Zedillo ``para con estos humildes servidores públicos''.
En Querétaro y Tabasco miembros del Frente Amplio de Lucha Democrática -entre ellos 13 esposas de los ayunantes- y del Patronato Hombre-Hermano realizaron actos de apoyo a los ex barrenderos e iniciaron la junta de firmas que enviarán al presidente Zedillo exigiendo una solución definitiva. (Triunfo Elizalde y José Gil Olmos; Alberto Espinosa y René Alberto López, corresponsales).