La Jornada 15 de enero de 1997

EU: habrá riguroso monitoreo de los helicópteros enviados a México

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 14 de enero Ť El Departamento de Estado informó al Congreso estadunidense de su intención de ``monitorear rigurosamente'' el uso de los helicópteros trasladados a las autoridades de México para actividades antinarcóticos.

En respuesta a una carta enviada por el caucus de Derechos Humanos del Congreso al secretario de Estado, Warren Christopher, en la que expresa la preocupación por la posibilidad de que los helicópteros UH-1H trasladados al gobierno mexicano para la lucha antinarcóticos pudieran involucrarse en actividades que resulten en la violación de los derechos humanos, el Departamento de Estado aseguró que se establecerá un ``régimen de monitoreo'' para vigilar el ``uso final'' de esos aparatos.

Barbara Larkin, secretaria asistente de Estado para Asuntos Legislativos, redactó la respuesta en la que se asegura al caucus de Derechos Humanos, presidido por el representante Tom Lantos, que ``el gobierno de México ha ofrecido seguridades formales de uso final'' al gobierno de Estados Unidos regulando el uso de los helicópteros UH-1H, y destacó que bajo el acuerdo para el traslado, ``la misión de estos helicópteros será de apoyo antinarcóticos''.

Larkin indicó a los legisladores que Estados Unidos ``monitoreará rigurosamente'' el uso del equipo a través de un ``régimen de monitoreo'' acordado con México, que incluye informes bimestrales de la Secretaría de la Defensa Nacional sobre el uso de los helicópteros, visitas trimestrales a las bases aéreas para observar el equipo, la inspección de los documentos sobre operaciones y entrevistas con los pilotos, además de visitas sin previo aviso, de corto plazo, ``si las circunstancias lo ameritan''. Y concluye que ``estamos satisfechos de que México utilice estos helicópteros con las intenciones previstas...''


Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 14 de enero Ť El presidente del Comité Bancario de la Cámara de Representantes, James Leach, acordó programar audiencias en torno del lavado de dinero en el suroeste de Estados Unidos, las cuales incluirán una nueva investigación de bancos específicos en esa región y sus vínculos con narcotraficantes mexicanos.

Henry González, representante por Texas y miembro del Comité Bancario, solicitó las audiencias como parte de una investigación sobre los orígenes de un superávit de 3 mil millones de dólares en el circulante en la sucursal de San Antonio del Banco de la Reserva Federal de Dallas. Esta semana, González expresó su desilusión porque las agencias de seguridad pública y los reguladores de la banca no han podido explicar detalladamente la fuente de esos fondos.

En cartas enviadas este mes al presidente del Banco de la Reserva Federal, al presidente de la Asociación Americana de Banqueros y al Servicio de Ingresos Internos del gobierno estadunidense, González informó que presentará un proyecto de ley para forzar a esas agencias a recaudar la información para responder a dicha interrogante.

En una misiva a Leach solicitando las audiencias, González señala que además del superávit de circulante en la Reserva Federal, por lo menos ocho bancos del suroeste han reportado incrementos de circulante por más de 100 millones de dólares, y ``nadie ha podido explicar por qué estos bancos... tienen superávit tan grandes'', escribió González.

El representante texano manifiesta que no necesariamente acusa a esas instituciones de realizar alguna actividad ilícita; pero más adelante, en su misiva añade que por lo menos uno de esos bancos es propiedad de una persona ``incómo-damente cercana a narcotraficantes''. Fuentes legislativas indicaron que González se refirió en particular al Laredo National Bankshares.

En una carta enviada por separado al presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, González de nuevo señala el caso particular del banco en Laredo. Le pregunta a Greenspan si al considerar las fusiones se examina si los bancos involucrados tienen grandes superávit de circulante y las explicaciones de ello.

``Por ejemplo --escribe González en la carta, copia de la cual fue proporcionada a La Jornada--, en la fusión propuesta entre Laredo National Bankshares, Inc., y Mercantile Financial Enterprises de Brownsville, ¿la Reserva Federal está tomando en cuenta si esos bancos tienen superávit con la Reserva Federal?''

El representante González, el demócrata de más antigüedad en el Comité Bancario, ha sido un crítico persistente del sistema de la Reserva Federal, y el año pasado comenzó una investigación sobre lavado de dinero en Texas. Sus solicitudes de información a varias agencias gubernamentales han rendido pocos resultados hasta la fecha.

En diciembre, el Departamento del Tesoro sugirió ``explicaciones razonables'' para el superávit de circulante en esta región. Una de ellas, ofrecida por el comisionado asistente del Tesoro, Ted Brown, es que los superávit pueden ser resultado de envíos en bulto de efectivo desde México.

Aunque en el pasado este tipo de envíos ha sido dirigido directamente al Banco de la Reserva Federal en Nueva York, en 1993, según Brown, los bancos mexicanos empezaron a trasladar sus superávit de efectivo al Banco de la Reserva Federal en Texas.

Sin embargo, González no acepta la explicación. ``Los envíos de efectivo en bulto de bancos mexicanos al Banco de la Reserva Federal en San Antonio provocan interrogantes todavía más preocupantes'', dijo en respuesta a la explicación del Departamento del Tesoro.

González también es conocido por sus críticas al narcotráfico en México y el lavado de dinero vinculado con esa actividad. Con el intercambio de cartas esta semana y el acuerdo concretado con el presidente del Comité Bancario, el republicano Leach, González ha preparado el terreno para continuar este debate durante 1997.