La Jornada 21 de enero de 1997

Respalda el clero ecuatoriano el paro convocado contra los ajustes económicos

Reuter, Efe y Ap, Quito, 20 de enero Ť La Iglesia católica ecuatoriana justificó hoy la decisión de trabajadores y estudiantes de iniciar jornadas de protesta en todo el país contra los ajustes económicos implantados por el gobierno del presidente Abdalá Bucaram, pero los exhortó a no recurrir a la violencia.

Mientras, el ministro de la Presidencia, Miguel Salem, se declaró dispuesto a acatar la huelga general, y reconoció que los ajustes impuestos por el gobierno afectan gravemente la economía de la población. Salem aclaró, sin embargo, que el gobierno no tenía otra alternativa y que Bucaram está ``muy dolido'' por haber tenido que adoptar las medidas.

El cardenal de Ecuador, Bernardino Echeverría, justificó el paro general de actividades convocado para el 5 de febrero, y afirmó que los trabajadores tienen derecho a ``demostrar que se paddece un momento de crisis'' y a hacer sentir al gobierno que la población ecuatoriana vive en la angustia por falta de recursos, siempre y cuando las manifestaciones se realicen ``con tranquilidad''.

El prelado se apresuró a aclarar que si bien la Iglesia no respalda las protestas, éstas son justificables siempre y cuando se hagan con ``conciencia y responsabilidad''. La declaración de Echeverría tomó por sorpresa a los medios de comunicación locales, los cuales señalaron que durante los últimos ocho años el clero mantuvo una actitud conciliatoria hacia todas las medidas gubernamentales.

Sindicalistas y estudiantes ecuatorianos pretenden, con las movilizaciones y la huelga, presionar al gobierno a derogar incrementos de entre 160 y 250 por ciento en las tarifas del gas, teléfono, luz y transporte. Hace dos semanas, universitarios y preparatorianos protagonizaron violentas protestas callejeras, cuyo saldo fue de más de 30 heridos y 150 detenidos.

Por otra parte, Bucaram calificó de ``ambiciosa'' a la vicepresidenta de la República, Rosalía Arteaga, quien lo criticó por haber propuesto recientemente al presidente peruano, Alberto Fujimori, que sus respectivos países deben concederse ``un perdón mutuo'', tras la guerra no declarada entre Ecuador y Perú de principios de 1995.

Bucaram hizo esta propuesta durante su visita oficial a Lima la semana pasada, y ésta fue criticada por sectores opositores, quienes señalaron que, en todo caso, Perú debe ser perdonado por Ecuador, que ha sido víctima de agresiones por parte del país vecino en 1941, 1981 y 1995