La Jornada 21 de enero de 1997

Otros 50 barrenderos iniciarán ayuno, anuncian Magaña y Salgado

Triunfo Elizalde Ť El senador Félix Salgado criticó a Mireille Roccatti, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al señalar que defrauda la confianza que ``millones de mexicanos'' abrigan con ella. ``Me incluyo, ya que voté a favor de su nombramiento'', indicó.

``Pensé que por su condición de mujer sería más sensible, pero nos equivocamos. No hay consistencia en sus pronunciamientos sobre el caso Tabasco'', agregó el legislador, al impugnarla por no recibir a una comisión de barrenderos para enterarlos de qué hace la CNDH para ayudarlos a resolver el problema con los gobiernos central y de Tabasco.

Más tarde, Salgado y Aquiles Magaña dieron una conferencia de prensa en la que dijeron que ``en vista de que en la Secretaría de Gobernación no se reanuda el diálogo, en breve unos 50 barrenderos de Tabasco se declararán en huelga de hambre frente a la CNDH'', y retaron: ``Que los granaderos vengan a levantarlos''.

Para el senador perredista, la imagen que actualmente refleja la CNDH es de una oficina paraestatal que carece de autonomía, se ve alejada de querer resolver problemas como el de los barrenderos, que han sido agredidos a sus puertas, ``y no se sabe que realice una acción firme para que sean castigados quienes ordenaron ese operativo policiaco''.

En otro orden, señaló: ``Mañana voy a comprar en Xochimilco cuatro macetones similares a los que se rompieron en el interior de la Cámara de Diputados -cuando se introdujo junto con él un grupo de barrenderos de Tabasco-. Voy a reponer el daño causado a la nación, según algunos diputados y senadores de la Comisión Permanente''.

El legislador agregó: ``Más daño causan a la nación los legisladores que cobran por no hacer nada. Yo por lo menos demuestro en todo momento que estoy tratando de servir a quienes tuvieron confianza en mí al elegirme como senador''.

Salgado criticó también a quienes buscan su desafuero, y explicó ``el significado filosófico'' que encierra el que algunos trabajadores de limpia se hayan desnudado frente a los legisladores.

``No acaban de entender que es una forma de desnudar a todos los que quieren ignorar los problemas que aquejan al pueblo, y que se escandalizan de un desnudo, cuando los que han sido encuerados moral y políticamente son los propios diputados y senadores, que hoy quieren promover un acto en mi contra de desafuero'', indicó.

Desde temprano, el reconstruido campamento de los ex trabajadores de limpia fue vigilado por agentes policiacos y de la Secretaría de Gobernación.

Algunos de los barrenderos que resultaron con lesiones menores durante el desalojo han sido atendidos de sus heridas por grupos de jóvenes que conocen de primeros auxilios, y que en todo momento se muestran interesados en ver cuál es su estado de salud.

Más tarde, Salgado y Aquiles Magaña dieron una conferencia de prensa y advirtieron que ante la no reanudación del diálogo, 50 barrenderos se declararían en huelga de hambre frente a la CNDH.

Comentaron que por la tarde habían estado en Gobernación esperando ser recibidos por el secretario Emilio Chuayffet o el subsecretario Arturo Núñez. ``Asistimos al considerar el comunicado en el que esa dependencia nos exhorta a continuar el diálogo, pero como en otras ocasiones, todo era un engaño'', expresaron.

Al saber que la presidenta la CNDH manifestó que esa institución no puede ser garante de ningún convenio, dijeron que ellos nunca oficializaron que fueran garantes Cuauhtémoc Cárdenas, Julio Scherer o Carlos Payán, porque sabían que esa idea no era del agrado de las autoridades