La Jornada 25 de enero de 1997

FESTEJO TABASQUEÑO

Triunfo Elizalde Ť En medio de danzones, cumbias, música tropical, sopes de papa y pollo con rajas de chiles jalapeños, pedazos de pastel, jugos de sabores; abrazos, muestras de alegría, rostros tristes, ramos de flores, porras, discursos y muestras de camaradería popular, los trabajadores de limpia de Villahermosa, Tabasco, se despidieron ayer de todos quienes los apoyaron en su lucha laboral de 100 días.

El festival del adiós se inició desde la una de la tarde frente a la sede de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en donde lo mismo llegaron amas de casa de la Magdalena Contreras que cotidianamente llevaron alimentos a los acompañantes de los siete declarados en huelga de hambre, grupos de jóvenes, universitarios o evangélicos o del FZLN que se distinguieron por su activismo en las porras, las vallas y las colectas de dinero.


Baile frente a las instalaciones de la CNDH
para festejar la victoria de los barrenderos
de Tabasco.
Foto: Carlos Cisneros

Como era de esperar, llegaron en su vieja ambulancia el Padre Nacho y sus ayudantes, todos ex alcohólicos regenerados; la entusiasta maestra Lucía Abascal Bulger y su hija del mismo nombre que durante los 100 días del movimiento, diariamente llevaron pan, tamales, pasteles caseros y entusiasmo. No podían faltar Nuria Fernández y sus apoyantes perredistas; rostros masculinos y femeninos de nombres ignorados, pero comunes en el campamento.

No faltaron al acto final Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Alberto Guerrero y Rafful Terán Sánchez, abogados asesores, diputados perredistas y algunos otros que acompañaron a los líderes de la resistencia: Aquiles Magaña y el senador perredista Félix Salgado. Todos ante el micrófono tuvieron expresiones de reconocimiento para los modestos barrenderos tabasqueños.

Fueron múltiples las ocasiones en que se recordó a los ayunantes de más de 96 días: Venancio Jiménez Martínez y Jorge Luis Magaña Alamilla; también a quienes cumplieron más de 58 días: Agustín Vicente Sánchez, Rodrigo Gonzalez Suárez, Jesús Jiménez Montero, Antonio Méndez Hernández y Adolfo Sánchez Balcázar, que con el sacrificio de su salud quebraron las barreras de la arbitrariedad y el despotismo.

Aquiles Magaña y Félix Salgado agradecieron a todos los que ayudaron al movimiento, en especial a la sociedad en general que los apoyó de varias maneras; a los políticos: ``los que sí trabajan por el pueblo que los llevó a las cámaras''; a las agrupaciones sociales, a las ONG, a los estudiantes, a las jovencitas que se entregaron a colaborar en todo; de paso, a los medios de comunicación que tuvieron comprensión para ese grupo de trabajadores mexicanos de la provincia.

Los siete ayunantes se hallaban, desde ayer en la tarde, en el Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional. Fueron sacados del nosocomio de Xoco por Félix Salgado y Aquiles Magaña, para que se recuperaran