Aumentó 171% la canasta básica en dos años; los salarios, 71%
Patricia Muñoz y Judith Calderón Ť En los dos años que han transcurrido del presente sexenio el costo de la canasta básica se elevó 170 por ciento, al pasar de 688.50 pesos a mil 854 pesos, mientras los salarios se quedaron muy atrás, al aumentar 71 por ciento en promedio, durante el mismo lapso.
Un informe del Congreso del Trabajo (CT) y estadísticas sobre el comportamiento de los precios de la Secretaría de Comercio (Secofi), revelan que en lo que va del régimen zedillista los productos de primera necesidad se han incrementado entre 100 y 400 por ciento.
Según el reporte mensual de precios-salarios del CT, las alzas en los productos básicos durante los dos últimos años fueron ``escandalosas''; incluso hay casos extremos como el del garbanzo, cuyo precio se incrementó 411 por ciento, ya que la bolsa de medio kilo pasó de 2.15 a 11 pesos.
La información de la Secofi apunta que entre los productos que se elevaron de precio más del 200 por ciento en el presente régimen, se encuentran la avena, con un aumento de 205 por ciento; atole de maicena, 201; sopa de pasta, 203, y harina de maíz, 273 puntos porcentuales.
Los básicos fueron los que tuvieron los aumentos más fuertes, como la tortilla, en 166 por ciento; aceite comestible, 177 por ciento; arroz, 101; azúcar, 133; atún, 131; café en grano, 91.6; frijol, 274.6; harina de trigo, 473.3; jabón en barra, 241; carne de pollo, 134, y huevo, 211 por ciento, entre otros.
En tanto, el salario promedio general en el mismo lapso de referencia pasó de 15.40 a 26.45 pesos diarios, lo que refleja un aumento de 71 por ciento.
Por ello, el trabajador necesitaría ganar ``más del doble del salario mínimo para poder adquirir sólo la canasta básica de alimentos, sin incluir uno solo de los satisfactores básicos restantes, como vivienda, salud, transporte, ropa, calzado, etcétera, apunta el estudio del CT.
Un kilo de carne = 11 horas de trabajo
Los cálculos de este organismo señalan que actualmente un kilogramo de carne de puerco equivale a 11.38 horas de trabajo de un obrero con salario mínimo, o sea, más de una jornada de trabajo. Antes de los numerosos pactos de concertación se requerían cinco horas de minisalarios.
El café es otro de los casos notables, ya que un obrero requiere de 8.16 horas de salario mínimo para poder comprar un kilogramo de este producto, mientras en 1986 bastaban 3.45 horas de trabajo.
Esta situación se generaliza en prácticamente toda la canasta básica: un kilo de caldo de pollo es equivalente a 14 horas de trabajo; un frasco de mayonesa de 800 gramos, significa 6.40 horas de labores para un miniasalariado; un rollo de papel higiénico cuesta lo de 2.40 horas de trabajo, y para comprar 300 gramos de leche en polvo se requiere la mitad de la jornada de trabajo de un obrero.
El análisis del CT también apunta que un kilogramo de huevo cuesta lo mismo que tres horas de trabajo; un kilo de galletas saladas, 4.30 horas; un kilo de carne de pollo llega a valer lo mismo que 7.40 horas de minisalario y uno de frijol --de regular calidad-- es igual que cuatro o cinco horas.
El estudio apunta que el poder adquisitivo se encuentra sumamente mermado, al señalar que con un día de salario un obrero sólo puede comprar o 2.6 kilos de huevos o 700 gramos de carne de regular calidad. A estos trabajadores su salario diario no les alcanza más que para dos kilos de frijol; sin embargo, antes de que empezara la década de los ``pactos'' podían adquirir con esta paga el equivalente a 7 kilos de frijol.
En consecuencia, ha disminuido el consumo per cápita de básicos como cereales y granos, legumbres, frutas, y particularmente las carnes de todo tipo, incluyendo mariscos, precisa el documento.